La clasificación del Real Betis de Manuel Pellegrini y Claudio Bravo a los cuartos de final de la Copa del Rey tras derrotar a Sevilla, se vio empañada por el lamentable comportamiento de uno de sus hinchas.
Un fanático le arrojó una barra de PVC al futbolista rojiblanco, Joan Jordán, que desencadenó en la suspensión del Betis-Sevilla en el minuto 39 y su reanudación 17 horas después, ya a puertas cerradas el domingo, en el estadio Benito Villamarín. Sin embargo, el hincha de Real Betis que agredió al jugador sevillano ha sido detenido por desórdenes y lesiones.
Fuentes policiales informaron este lunes de que el detenido, J.C.L.E., nacido en 1992, fue arrestado y, posteriormente, puesto en libertad con cargos como presunto autor de dicha agresión.
El individuo, de 29 años y que estaba en la grada de Gol Sur del estadio bético, fue detenido por agentes de la Brigada Provincial de Información por supuestos delitos de desordenes públicos y lesiones, e igualmente ha sido propuesto para una sanción por infracción de la Ley del Deporte.
El detenido ha quedado en libertad con cargos y, según precisaron las fuentes, tiene antecedentes policiales por malos tratos, lesiones y robo con fuerza.
El partido Betis-Sevilla de los octavos de final de la Copa del Rey tuvo que suspenderse el pasado sábado tras recibir el sevillista Jordán el impacto en la cabeza de una vara de PVC de medio metro de largo lanzada desde el gol sur del Benito Villamarín.
La Policía Nacional, integrante del dispositivo de seguridad activado para ese encuentro, inició entonces una investigación, mientras que el derbi se reanudó a partir de las 16.00 horas del domingo, ya a puerta cerrada, donde el Betis se clasificó para los cuartos de final de la Copa del Rey al vencer a su eterno rival por 2-1.