Real Betis está en plena pretemporada y este miércoles empató con Coventry en un nuevo amistoso del equipo de Manuel Pellegrini. Y uno que volvió a estar ausente, es Borja Iglesias.
Tras una temporada a préstamo, quien fuera el goleador de los andaluces hace un par de años vive un duro presente: el Ingeniero no quiere saber nada de él.
Y es que mientras no consiga club para irse, el Panda está cortadísimo en la pretemporada de Betis.
- Te podría interesar: El millonario sacrificio de Antony para acercarse un poquito más a Manuel Pellegrini
De figura, a cortado
El futuro de Iglesias por ahora es incierto. El último año estuvo cedido en Celta de Vigo, club que buscan su regreso, pero las negociaciones no han estado fáciles con los albiverdes.
Que no sea parte de los amistosos del Real Betis -este miércoles no fue ni a la banca- le da una señal al Celta de que solo es cosa de tiempo para poder ficharlo.

Como consigna Estadio Deportivo, los celestes "podrían lanzar pronto una ofensiva acorde al contexto una vez que ha quedado en evidencia que Pellegrini no considera a Borja Iglesias para el Betis 25/26“.
El quiebre con el Panda
Deterioro es la palabra que más se ocupa en España a la hora de describir la relación de Manuel Pellegrini con Borja Iglesias. De pasar a ser su regalón y marcar en total 52 goles en 182 partidos en los andaluces, hoy el chileno no cuenta con él.
El delantero de 32 años dejó el equipo en enero de 2024 tras una mala racha y cuando ya sentía que se había cumplido un ciclo en Sevilla.
Partió al Bayer Leverkusen, pedido expresamente por Xabi Alonso. No marcó goles, por lo que poco le funcionó su partida a Alemania.
Y ya de regreso, no tenía cabida en el Betis. El cuadro del Ingeniero prefirió mandarlo a préstamo al Celta, demostrando que su ciclo en el equipo ya estaba terminado.
- Te podría interesar: Listo un nuevo refuerzo en Real Betis de Manuel Pellegrini
11 goles fue el registro del español en su nuevo equipo, donde espera volver cuando los clubes se pongan de acuerdo.
Borja tiene contrato hasta mediados de 2027, y el conjunto vigués estaría dispuesto a pagar como máximo 2 millones de euros por su carta.