Una mujer de 64 años salió a pasear en los recientes días en las inmediaciones de un reconocido bosque en el distrito de Cannock Chase, Staffordshire. Sin embargo, encontró una "colección de muñecas" que se encontraban clavadas en los árboles. El hallazgo provocó las especulaciones sobre supuestos rituales satánicos y otro tipo de cosas similares en ese lugar. De hecho, una zona cercana a ese sitio alberga un antiguo acontecimiento relacionado con una ola de asesinatos, según informa el Heraldo.
Esta señora, quien se identificó como una enfermera del Hospital Walsall Manor, comentó que había salido a dar una vuelta y una vez que llegó a la zona de "The Chase", comenzó a adentrarse entre la maleza hasta que dio con la colección de juguetes bastante rara.
"Estaban en una especie de orden. Sus vestidos estaban todos andrajosos, estaban todos atados y clavados a los árboles", añadió que se encontró con un letrero al salir del bosque "vi un letrero que decía que este era el quirófano del antiguo Pensions Hospital… Fue un poco extraño considerando lo que hago por mi trabajo".
Se dice que en ese lugar se encontraba un viejo pueblo minero conocido como Brindley Village. El área donde se encontraron las muñecas corresponde a un antiguo hospital local de aquel poblado.
La zona también es conocida por el caso de los Asesinatos de A34, a finales de los 60 cuando Raymond Leslie Morris de Walsall asesinó a tres estudiantes mujeres. Desde entonces, persiste el mito de que el lugar está maldito. Mientras tanto, la policía investiga supuestos rituales satánicos ya que, según parece, también se encontró un tablero de ouija cerca de las muñecas.