Un insólito caso se dio a conocer en el condado de Smith, en Texas, luego de que se descubriera que William George Davis (37), que se desempeñaba como enfermero en el Hospital Christus Trinity Mother Frances, fuera acusado de haber matado a cuatro pacientes tras inyectarles aire en las arterias mientras se recuperaban de operaciones cardíacas, según señaló el medio People.
De acuerdo a la información recopilada y una serie de investigaciones, se solicito la detención de Davis dado que según registros de las cámaras de seguridad del centro de salud, el hombre fue visto ingresando a las habitaciones de los pacientes identificados como John Lafferty, Ronald Clark, Christopher Greenaway y Joseph Kalina, quienes se recuperaban de sus operaciones cardiacas y fallecieron entre los años 2017 y 2018.
Si bien el hombre fue despedido en el año 2018, no fue hasta este año que se inicio un seguimiento del caso para esclarecer la causa de muerte de los pacientes. Durante es el miércoles se realizó la apertura del juicio donde se presentaron hipótesis y pruebas que culpan a Davis.
El fiscal Chris Gatewood detalló en el juicio que el motivo de Davis era "simple", argumentando que "le gusta matar a la gente. Le gustaba ir a las habitaciones e inyectarles aire. Si miras el video sobre Kalina, se puso al final del pasillo y miró esos monitores y esperó. Eso es porque le gustó".
Asimismo, el Dr. William Yarbrough, testificó que los escáneres cerebrales mostraron que el daño cerebral en los pacientes fue causado por el aire y descartó problemas de presión arterial. Además, detalló que el cuidó a tres de las cuatro personas que murieron por esta causa en el hospital, añadiendo que era "inconcebible" que el aire hubiera entrado al cerebro durante la cirugía.
En tanto, según lo detallado por el medio, los fiscales a cargo del caso planean solicitar la pena de muerta durante la fase de sentencia del caso.
