
Jimmy Hoffmeyer demandó ante un tribunal federal de Grand Rapids, en Michigan, a la escuela pública de Mount Pleasant donde asiste su hija de siete años, quien de acuerdo a declaraciones entregadas por el padre a la menor se le violaron los derechos constitucionales luego de que cortaran su pelo sin su consentimiento, según consignó CBS News.
La demanda es de 1 millón de dólares y va dirigida contra el establecimiento educacional, un bibliotecario y un asistente del profesor por discriminación racial, intimidación étnica, infligir intencionalmente angustia emocional y agresión, señaló el medio.
Los hechos
Hoffmeyer afirmó que en marzo de este año, su hija Jurnee llegó a la casa desde la escuela con el cabello cortado por un lado de la cabeza. La menor señaló que un compañero utilizó unas tijeras para cortarlo cuando iban en el autobús.
Tras el suceso, el padre llevó a Jurnee a la peluquería para poder cortar su pelo de manera simétrica y que no se notara demasiado el corte que le había hecho el compañero. Sin embargo, dos días después la niña llegó a la casa nuevamente con el pelo cortado.
En tanto, el progenitor le preguntó que había pasado otra vez. "Pensé que te había dicho que ningún niño debería cortarte el pelo, pero ella respondió: "papá, fue la maestra". La maestra le había cortado el cabello para emparejarlo".
Demanda
De este modo, Hoffmeyer sostuvo en la demanda que el establecimiento "no pudo capacitar, monitorear, dirigir, disciplinar y supervisar adecuadamente a sus empleados, y sabía o debería haber sabido que los empleados se involucrarían en el comportamiento denunciado debido a la capacitación, costumbres, procedimientos, políticas inadecuadas y la falta de disciplina que existía para los empleados".
Es por esto que durante el mes de julio, el centro educacional señaló que a pesar de las "buenas intenciones" que tuvo la educadora, había violado la política escolar por cortar el pelo de la menor sin el consentimiento de los padres, por lo que fue reprendida por las autoridades.
Sin embargo, en la investigación que incluyó entrevistas con personal del establecimiento, estudiantes, familias y archivos de redes sociales, no se encontró ninguna discriminación racial.
Asimismo, Amy Bond, presidenta de la junta escolar de Mount Pleasant, recalcó que la escuela no ha recibido la demanda y que se defenderán de las acusaciones infundadas.