Durante las primeras horas del lunes 6 de febrero un sismo de magnitud 7.8 se registró en Gaziantep, ciudad de Turquía, donde los habitantes se encontraban durmiendo mientras sucedió la catástrofe.
Sin embargo, un ciudadano logró capturar el momento en que se desarrollaba el movimiento telúrico, registro en el que se puede escuchar el sonido de este fuerte movimiento telúrico.
El ruido se genera tras la fractura de la corteza terrestre, la que en Turquía ocurrió a solo 18 kilómetros de profundidad, por lo que no perdió la suficiente fuerza antes de llegar a la superficie.
Cabe destacar que la réplica tuvo una magnitud 7.5, a diferencia de otros terremotos en el mundo donde la intensidad es menor.
Considerando que la falla tuvo una extensión de 150 kilómetros de largo, abarcando una superficie muy grande, se logra entender la destrucción que generó en el país y se considere uno de los más devastadores de la última década.