Si estás planificando algún viaje fuera del país, debes tener presente que a bordo pueden surgir problemas relacionados con el equipaje o la comodidad de los pasajeros al interior del avión.
También existen otros que pueden ser más graves y que pueden afectar a una parte importante de la tripulación, tal como le ocurrió a una popular aerolínea hace varios años, y que hoy enfrenta las consecuencias.
¿Qué pasó?
En el año 2015, American Airlines, cambió la política de sus uniformes, es decir, sus empleados debían vestir prendas que proporcionaba la empresa Twin Hill. En total, esperaban que más de 65.000 mil trabajadores se presentarán con este tipo de vestuario, pero el único problema fue que las pruebas de laboratorio arrojaron que podían tener reacciones adversas al material de la ropa.
A pesar de que se descubrió la presencia de formaldehído y otras 15 sustancias químicas relacionadas con graves problemas de salud, la compañía no cambió su política. A raíz de esto, los auxiliares de vuelo se vieron afectados con síntomas neurológicos, erupciones cutáneas y afecciones respiratorias.
Este hecho se extendió hasta el año 2017, y en ese momento un grupo de trabajadores interpuso una demanda a la aerolínea. El jurado validó la causa y fijó que debían recibir 18,6 millones de dólares por los daños, American Airlines era responsable del 10% y Twin Hill del 90%.
