Esta jornada se viralizó un polémico vídeo en redes sociales, en el cual un pastor golpeó y tiró al suelo a un militar que fiscalizó el culto religioso que se llevaba a cabo, para luego fingir ser atropellado por uno de los autos. Este fue formalizado, y quedó en libertad, pero con arraigo nacional y prohibición de acercarse al uniformado.
El hecho ocurrió en Paillihue, Los Ángeles, cuando las personas se enfrentaron al personal del Ejército, y la Secretaria Regional Ministerial (Seremi) de Salud, quienes fueron a fiscalizar un presunto culto religioso.
En el audiovisual se pueden ver vehículos retirándose del lugar, mientras que César Lagos, un hombre de 44 años, simuló ser atropellado por la parte trasera de una camioneta, lanzando un grito de dolor por el impacto que el mismo se provocó. Tras esto, se afirmó en la parte baja del auto mientras este iba en movimiento.
Tras esto, este se paró de un momento a otro para ayudar a una persona que se estaba enfrascando a golpes con un militar, por lo cual entre ambos lo redujeron y lo tiraron al suelo.
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