Luis Marcoleta forma parte de la historia del fútbol chileno. El entrenador de 63 años cuenta con el récord de ocho ascensos en el balompié nacional y una destacada trayectoria profesional. Sin embargo, por ahora está lejos de querer quedarse en casa disfrutando de sus logros, ya que aún tiene objetivos pendientes.
"Tengo ocho ascensos, mi meta es llegar a los 10. Cuando llegue a los 10 ascensos, quizás ahí piense en tirar la esponja. Imagínate las ganas que tengo de lograr ese objetivo que tengo en lo personal. El equipo que a uno lo contrata va a ser el beneficiado, no es casualidad ocho ascensos, hay un trabajo, un conocimiento, metodología", expresa en conversación con En Cancha.
De momento Marcoleta no se ve en un club específico: "Esas son mis aspiraciones, más que dirigir a tal o cual equipo, por lo menos ese es mi pensamiento, más que ir a un equipo grande, es quedar en la historia de los equipos".
Sorprende la meta, pero ya tiene el 80 por ciento cumplido
No estamos lejos, imagínate que este año con todas las dificultades, estuvimos ahí, casi casi con Deportes Valdivia (en Segunda División). Hubiese sido el noveno.
Con esto da la pista de que quiere seguir dirigiendo en ascenso
No necesariamente, yo soy entrenador de fútbol y como entrenador siempre voy a ir donde pueda ser un aporte. Donde a mi me quieran y me dejen trabajar entre comillas tranquilo. Soy un tipo perseverante, por eso tengo esa convicción, no de altivez, sino que del respaldo de lo que uno ha hecho para lograr 10 ascensos. Cuando logre 10 ascensos, no es que me vaya a retirar, voy a pensar si no sigo, porque amo mi profesión.
"No soy bueno para el marketing"
Es impresionante el récord, quiere decir que hay una medología que evolucionó.
Absolutamente, si yo no me hubiese capacitado, actualizado, no estuviera a la vanguardia, hubiera quedado obsoleto. Es cosas que revises mis tipos de entrenamientos, la puesta en escena, es lo mejor de lo mejor. No es casualidad ocho ascensos y 10 veces campeón, por eso digo que a veces el medio no le reconoce a uno lo que uno ha logrado, pero es parte de la idiosincrasia nuestra.
Si hay un mea culpa, es que el marketing mío ha sido horrible, jajaja. No soy muy bueno para "marketear". Es que no sería yo, como le digo a mis más cercanos, soy de perfil más bajo.
A lo mejor le falta gritar más en la cancha.
Eso es atractivo. Pero tengo un pensamiento, si te vas a poner a gritar en un partido, es porque no trabajaste en la semana. Te voy a confidenciar algo, cuando gritas al borde de la cancha, los jugadores ni te pescan, yo he hecho el catrasto. He preguntado a un montón de jugadores. "La verdad profe, uno no pesca, y cuando ve que la correción es para uno se va más para atrás". Como método llamo al borde de la cancha, para que me escuche, pero no soy de gesticular. Eso puede que algunos les guste, pero al futbolista le molesta.