Emilio Hernández, ex jugador de Colo Colo, Universidad de Chile y Unión Española, entre otros equipos, vive lejos del fútbol pero cerca de los motores. Y es que el ex ariete a sus 35, pasa sus días comprando y vendiendo vehículos para ganarse la vida. "Regalé todo, ni zapatos me quedan", dijo el Choro en conversación con Las Últimas Noticias. "Un día me dí cuenta que era más útil en la casa, con mi familia, que yendo a entrenar todos los días a Melipilla". Y agregó: "En Santiago generaba más ingresos que al estar jugando a la pelota. Llegaron dirigentes nuevos al club y se me quitaron las ganas de jugar. Ya no quería ni levantarme a ir a entrenar. Además mi esposa está estudiando, así que chao fútbol", confesó el ex atacante. Para el Choro Emilio, las jornadas de entrenamientos y exigencia física quedaron en el pasado. Y en cambio, destina sus energías a la compra-venta de autos chocados y/o usados en remate, rubro al que llegó gracias a otro ex futbolista, Óscar Magaña. "Él me dijo que me metiera en el negocio de los autos y acá estamos. Nos ha ido bastante bien. Tenemos a varios futbolistas como clientes", comentó al citado medio. Al igual que al resto de las personas, la crisis sanitaria provocada por el coronavirus también ha afectado el negocio de Hernández, quien tomó todos los resguardos pertinentes para evitar contagiarse de la enfermedad. "Esperamos que la crisis no nos afecte tanto. Igual hemos tomado todos los resguardos que recomendó la autoridad. Y también tengo más tiempo para la familia, con mis hijos", afirmó. Emilo, que también fue uno de los proyectables de Marcelo Bielsa durante su ciclo al mando de la selección chilena, también dedica su tiempo a dar clases de fútbol pero de manera particular y asegura que a sus pupilos nunca les ha mostrado un video suyo. "Es como un pituto que tengo, pero lo hago con mucho gusto. No les muestro videos míos, pero a veces los veo y me doy cuenta que nunca hice algo para mejorar mi técnica y mi físico. Me bastaba con el talento que tengo o tenía", cerró Hernández.