El entrenador de Nueva Chicago, Omar Labruna, recordó su paso por Colo Colo entre 2012 y 2013, analizó el rendimiento del equipo bajo su mando y aseguró que le gustaría regresar a Macul. Además, el ex ayudante de Ramón Díaz en River Plate, recordó su frase "la moda se acabó" que hizo alusión a Universidad de Chile, tras llevarse la victoria en el Superclásico y rememoró su accidente automovilístico.
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"Cuando llegué a Colo Colo me sentí a gusto. Sé cómo manejarme y había que ser Sportivo ganar, dirigir Colo Colo no es sencillo. Hay que saber manejar no solo el plantel, los tiempos, la prensa, los momentos y guardo los mejores recuerdos", inició el hijo de Ángel Labruna en conversación con el Al Aire Libre de Radio Cooperativa.
Al ser consultado si le gustaría regresar a Macul, el entrenador argentino indicó que "no lo dudaría ningún segundo, tengo los mejores recuerdos de ese club. Tengo un cariño muy grande por la gente y la gente se encariñó conmigo, es importante sentirse cómodo. Mi paso en Audax Italiano y Colo Colo fue bueno, en Everton no tanto. Si sale la posibilidad, sin ninguna duda volvería a Chile porque fueron más las satisfacciones que los momentos donde no me fue bien".
"La moda se acabó" fue la frase que dijo Omar Labruna tras derrotar a Universidad de Chile en el Estadio Monumental con anotación de Carlos Muñoz. El transandino recordó aquellas palabras que quedaron para la posteridad.
"A Sampaoli le fue muy bien, pudo dirigir la Selección. Cuando me tocó agarrar Colo Colo, en los clásicos no le iba muy bien, cuando jugamos con la U en el Monumental, el estadio explotaba. Dije la moda se acabó porque vimos a Colo Colo de la mejor forma, fue un término futbolístico, confiaba mucho en los jugadores, quedó marcado porque fue un triunfo importante, nos dio la posibilidad de terminar primeros en el campeonato", señaló Labruna.
Finalmente, tuvo palabras para el accidente automovilístico que protagonizó siendo entrenador de Colo Colo: "Fue un incidente feo, a uno le sirvió, asumí mi culpa y cumplí con todo lo que tenía que cumplir. Di charlas en barros carenciados, al taxista que choqué le retribuí el auto, me maneje como persona de bien. Sirve de experiencia, sirve para no volver a cometer más, porque a uno lo marcan".
