El club que busca luchar contra la estigmatización de su comuna y este año debutará en Segunda División

En Real Juventud San Joaquín solo hay alegría después de conseguir el inédito ascenso a la Segunda División, donde harán su estreno el fútbol profesional. La felicidad no es solo por el logro de subir de categoría, sino por el largo camino que han atravesado para ser parte de la élite del deporte chileno.

El pasado 30 de diciembre, los "Chicos Buenos" vencieron por 4-1 a Provincial Ranco y aseguraron el segundo puesto del triangular final de la Tercera División A, que les permitió alcanzar el hito más importante en sus 23 años de historia.

"Hay felicidad, porque fue por lo que trabajamos durante todo el año como equipo. Fue el primer objetivo que nos planteamos, aunque fue difícil. Por eso nos da mucha satisfacción. Es importante, porque es para lo que uno trabaja. Al cumplirlo, uno se llena de felicidad", contó Leandro Ruiz, goleador del equipo, en conversación con En Cancha.

En tanto, la ilusión de Real San Joaquín comenzó tras terminar en el primer lugar del Grupo A, que les permitió jugar la fase por el ascenso con Trasandino de Los Andes y los "Milenarios". Sin embargo, cayeron en todos los partidos y parecía alejarse la opción de ascender, pero el dominio del "Cóndor" en el triangular los mantuvo con vida hasta la última fecha.

De ser una escuela de fútbol al ascenso a Segunda División

Por otro lado, la historia del club que representa a la población La Legua es más que interesante, debido a que comenzaron como una escuela de fútbol Iván "Bam Bam" Zamorano creada por Jaime Lizama, actual DT, para darle más oportunidad a los jóvenes de dicho sector.

Sin embargo, no fue hasta 2014 que fueron aceptados por la ANFA para participar en la Tercera División B, y un año después lograron ascender a la Tercera A. En esta categoría, consiguieron realizar buenas campañas, pero fueron amargados por Deportes Recoleta y Deportes Limache.

"Sinceramente, es bonito representar una institución que es de esfuerzo, porque la mayoría de los jugadores somos de esfuerzo, trabajo y no hemos tenido tantas oportunidades. Es un orgullo defender una camiseta así", cuenta el defensor Lucas Abarca.

El sacrificio valió la pena y en la temporada 2021 consiguieron el tan ansiado paso al fútbol profesional, algo inédito para La Legua, que a partir de este 2022 contará con su club en la Segunda División, donde se enfrentará a equipos como Deportes Concepción, San Antonio Unido y San Marcos de Arica, entre otros.

"La Segunda División tiene un buen nivel, aunque se nombre poco. En 2020 me tocó estar en General Velásquez y era alta la exigencia, con jugadores buenos técnicamente. Por ahí si se dan los resultados, se puede soñar con pelear por el ascenso", agregó Lucas Abarca, que se formó en las divisiones inferiores de la Universidad Católica.

La renovación de la directiva y el impacto para una comuna que lucha con la estigmatización

"La escuela Iván Zamorano fue ganadora de la Copa Chilectra y se ganaron el apodo de los Chicos Buenos por sus buenas actuaciones ganándole a las series juveniles del Real Madrid. Ganando en el Maracaná y siendo muy conocidos dentro del país", cuenta el gerente general, Cristóbal Muñoz, a En Cancha.

La gran particularidad de este dirigente es su juventud, debido a que a sus 24 años tomó el desafío de comandar a Real Juventud San Joaquín. El éxito fue inmediato, y en su primera experiencia fue parte del histórico ascenso.

"Es un desafío súper grande. Sobre todo por lo cerrado que es el ambiente del fútbol hoy en día. He tenido la suerte de encontrarme en el camino con gente muy abierta a nuevas ideas, que me han permitido utilizar mis capacidades de la mejor manera, sin importarles la edad que yo tengo. Y en ese sentido, la credibilidad se ha caracterizado por un trabajo serio, metodológico y profesional. Siendo un modelo emergente dentro del Fútbol", agregó.

Por otro lado, sus jugadores se refirieron al impacto que puede generar este paso al profesionalismo para la población La Legua, que muchas veces es estigmatizada por el narcotráfico y la delincuencia. Incluso, Leandro Ruiz sostuvo que sentían a diario el apoyo de los hinchas del sector.

"Es una población bien estigmatizada, pero hay harta gente que apoyaba y nos iba a ver hasta en los entrenamientos. Fue un honor defender la camiseta y conseguir el objetivo que nos pedían. Estoy satisfecho porque hubo felicidad plena con los hinchas. Tras el ascenso, nos fuimos todos juntos a la sede del club ahí en La Legua, compartimos y estuvimos con todo el plantel. Había felicidad plena en la población", apuntó el delantero formado en Magallanes.

Por su parte, Lucas Abarca habló sobre los resultados que se pueden obtener en la comuna a raíz de este paso al profesionalismo, donde indicó que "puede cambiar harto el estigma que hay con La Legua. Eso no debería ser así, por ejemplo, a nosotros nos ayudaron harto los juveniles como sparring. Había varios chicos buenos, como dice el slogan del club, eran respetuosos en todo sentido. Va a marcar una nueva oportunidad para los niños y los jóvenes que tienen pocas oportunidades".

Ahora, Real Juventud San Joaquín se enfoca de lleno en la conformación de su plantel para el debut absoluto en la Segunda División, donde su principal objetivo es mantenerse y consolidarse en la categoría.

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