
Carlos Chandía, a sus 62 años, está feliz. Acaba de ser electo diputado por el Distrito 19 de la Región de Ñuble con poco más de 21 mil votos. “Muy contento. Me apoyó mucho la gente acá en Coihueco y en Chillán también. Me han tratado muy bien”, cuenta el exárbitro internacional chileno.
Tras dos exitosos períodos como alcalde de Coihueco, ahora da el salto a la Cámara Baja como representante de Renovación Nacional, pero seguramente también, como miembro de la bancada del deporte.
En ese escenario, el exjuez conversa con En Cancha sobre los temas que más urgen en el fútbol chileno, como el rol de las sociedades anónimas y la multipropiedad. De las primeras se declara seguidor, con matices y sobre el segundo tema es un contrario absoluto. También apunta fuerte a la televisación.
-Imagino que tiene una postura clara en su llegada al Congreso respecto al debate de la multipropiedad de los clubes del fútbol chileno.
Mi postura es que no puede dos clubes un mismo dueño. El tema de la sociedad anónima va muy bien, pero no se puede ser dueño de dos clubes que pueden tener intereses distintos. Uno puede campeonar y el otro va a estar peleando el descenso y les toca enfrentarse a las últimas fechas, imagínese lo que puede ocurrir.
-Su postura es la misma que se escucha desde hace mucho tiempo por parte de autoridades, la ANFP y los mismos directivos, pero nadie se está haciendo realmente cargo. Todos sabemos que pasa y seguirá pasando.
Pero por supuesto. Sí, como le digo, yo estoy de acuerdo con eso, en que podamos tratar el tema en la Cámara, podemos conversarlo, podemos socializarlo y legislar con respecto a eso.
Las SADP en el fútbol chileno: buenas y malas
-Usted conoce bien el tema de las sociedades anónimas con Ñublense. ¿Cómo evalúa la gestión del grupo que controla el club?
Acá el presidente es Sergio Gioino, con quien yo no tenía muy buenas relaciones en la cancha. Aquí he visto que ha hecho una gran gestión, y lo felicito por eso. Pero no se puede ser dueño de dos clubes porque creo que no sería prudente, no sería bueno, no sería competitivamente bueno, no sería tampoco económicamente bueno.
-¿Usted ha hablado este tema con él?
Mire, nos encontramos en el estadio, pero no hemos conversado el tema recientemente. Creo que esta fecha Ñublense juega acá, y si es así, seguramente lo voy a plantear y lo voy a conversar con él.
-¿Hablará de la multipropiedad? Porque respecto de la sociedad anónima propiamente tal, usted ahí no tiene problemas, ¿no?
No tengo problemas con eso, porque efectivamente ha servido mucho para levantar el fútbol. Ha sido muy bueno porque he visto el avance que ha tenido Ñublense acá en materia de infraestructura. Además que el complejo deportivo lo tiene en Paso Alejo, en Coihueco. Así que yo estoy feliz con ello.

-Ñublense es un buen ejemplo de SADP, pero hay otras en que los hinchas ya no dan más: Wanderers, Everton, Unión Española. ¿Qué pasa en esos casos? ¿Cree que hay que legislar en casos donde el trabajo no sea positivo y se aleje a los socios?
Sí, por supuesto, estoy dispuesto a conversar de ese tema. Es un tema relevante porque el fútbol es de las personas, es de la gente que va al estadio, no es de un grupo en particular. Y cuando ese grupo no cumple con la expectativa que tiene la gente de su club, evidentemente se va a empezar a ir del estadio, no va a asistir como se quiere. Y el tema de la televisión también le ha causado mucho daño al fútbol chileno.
El daño de la televisación al fútbol chileno
-¿Qué le complica de la televisación? Muchos clubes sobreviven gracias a esos ingresos.
Ha servido mucho para limpiar y para reforzar las estructuras del club, pero en definitiva está alejando a los socios de la cancha, del estadio. Es un tema importante de tener en consideración y hay que sacarlo a la luz también, porque la televisación de los partidos también evita que la gente se sienta más empoderada con el club.
-Pero en ese sentido, ¿qué aspectos de la televisación cree que habría que conversar o analizar?
Es que es complicado porque la televisión existe de siempre, pero ahora se televisan todos los partidos. Antes se televisaba un par y eso era suficiente. Hoy día se transmite hasta la Segunda División. Antes no imaginábamos eso, lo veíamos muy lejos. La gente no va al estadio porque justamente la televisación permite verlo desde la casa cómodamente, sin ir al estadio a mojarse, a sudar ni a transpirar. Pues yo creo que eso un poco le quita la esencia al fútbol. Pero bueno, los clubes económicamente están bien.







