La noche del martes 29 de mayo de 1973, ante la presencia de 72.532 espectadores en el Estadio Nacional, Colo Colo rozó la cima de América en la segunda final de la Copa Libertadores 1973, donde el equipo dirigido por Luis Álamos igualó sin goles ante Independiente de Avellaneda, estirando la instancia a una tercera definición en campo neutral.
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El cuadro popular había conseguido un valioso empate 1-1 en la ida jugada en Buenos Aires, pero el 0-0 en la vuelta no le sirvió para adjudicarse por primera vez el máximo trofeo continental a nivel de clubes, algo que habría sido histórico para el fútbol chileno a meses de que ocurriera el golpe de estado.
En aquella época no existía la diferencia de goles al anotar de visita como ocurría hasta hace tres años atrás, sino que el mejor de tres partidos se quedaba con la Copa si es que no había un ganador en la segunda final.
En la final del 29 de mayo el equipo del 'Zorro' Álamos formó de esta manera: Adolfo Nef; Mario Galindo, Leonel Herrera, Rafael González, Alejandro Silva; Guillermo Páez, Francisco Valdés, Fernando Osorio; Carlos Caszely, Sergio Messen y Leonardo Véliz.
Finalmente el tercer partido se jugó ocho días más tarde en la cancha del Estadio Centenario de Montevideo, donde el 'Rojo' se impuso por 2-1 en el alargue y terminó con la ilusión del pueblo colocolino.
