
Colo Colo
viene arrastrando una dura crisis, desde el inicio de la pandemia, la que explotó públicamente con la reducción de sueldos, luego que la directiva optara por acogerse a la
Ley de Protección al Empleo
, lo que causó un fuerte distanciamiento entre los jugadores y
Blanco y Negro.
Desde ese entonces, hasta el reinicio de los entrenamientos,
las relaciones estaban cortadas. U
na vez se retomaron las prácticas, a mediados de julio, la regencia encabezada por
Anibal Mosa
, trató de mejorar la comunicación con el plantel, y para ello, aprobaron la entrega de un bono a los referentes y figuras del equipo.
Una cifra de 550 millones
a repartir en porcentajes para seis futbolistas del plantel, tanto por derechos de imagen y conceptos de cesión de pase. Esto terminó siendo más que una ayuda, un motivo de desencuentro en la interna del camarín, e incluso, habría generado un fuerte roce entre dos jugadores en un entrenamiento. Todo este ambiente tenso ha provocado un silencio sepulcral en el
Estadio Monumental
, que por ahora se demuestra en las
conferencias de prensa
, ya que solo se realizan una vez a la semana y
el protagonista siempre es el mismo: Gualberto Jara.
Esto, a diferencia, por ejemplo, de Universidad de Chile y Universidad Católica, donde son tres los protagonistas: dos jugadores y el DT. En Colo Colo,
no se ve a algún jugador sentado en la sala de prensa de Macul
, desde antes del inicio de la pandemia. Fue el 10 de marzo luego del duelo contra
Athlético Paranaense cuando quien dialogó con los medios fue Pablo Mouche.
Lo hizo junto a Gualberto Jara, en algo que más corresponde a una obligación impuesta por Conmebol. De hecho, el día anterior al partido, quien acudió fue Gabriel Suazo, uno que está lejos de ser referente.
"Todo normal"
Este jueves, consultado por la situación, Gualberto Jara
se desmarcó de este silencio, apuntando a que son temas que no le conciernen. “
Este tema involucra directamente a los jugadores y dirigentes. Si ellos deciden informar, será una determinación de ellos
. En cuanto a lo que me compete a mí,
yo no tengo ningún problema de relación y comunicación con los jugadores, es más los veo bien y concentrados
”, puntualizó. Lo cierto es que
las cosas en Colo Colo no están bien
y todo lo que pueda pasar futbolísticamente con el reinicio del Campeonato Nacional pasa a ser una completa incertidumbre, teniendo en cuenta también que los objetivos no son menores:
Enmendar el rumbo en el torneo local y seguir luchando por la clasificación en el torneo continental.
Por ahora, en Macul nadie se atreve a decir cuándo se volverá a ver a un futbolista en la sala de prensa. Mucho menos, se filtran las razones de un silencio Monumental.