Durante la mañana de este lunes 1 de septiembre, Fernando Ortiz aterrizó en Chile para asumir como el nuevo director técnico del primer equipo de Colo Colo. En su primer día en nuestro país, el Tano estampó su firma en el contrato que lo ligará hasta finales del 2026 con la institución.
Si bien el DT argentino recién lleva un día en el Cacique y todavía no lidera ninguna práctica, después de sus primeras horas en el club ya se puede comenzar realizar un perfil del tipo de entrenador y persona que asumirá la dirección del plantel de honor de los Albos.

El lado B de la llegada de Fernando Ortiz
En la previa de la llegada de Ortiz al Estadio Monumental, Sebastián Vegas, con quien convivió en Monterrey, destacó el lado humano del entrenador y en su primer día ya se pudo ver esa cercanía, al menos con la prensa dispuesta en Macul.
Al momento de la llegada del técnico argentino a la sala de prensa, lo primero que hizo fue recorrer la habitación, saludando uno a uno a todos los periodistas y camarógrafos que se hicieron presentes para su presentación.
Este gesto de respeto llamó la atención desde el primer minuto, y a lo largo de la conferencia se pudieron apreciar más hechos para demostrar cercanía.
En primera instancia, reconoció a un periodista que lo había llamado mucho y se disculpó por no contestar. Posteriormente, bromeó con un colega por su peinado, a quien incluso ofreció pagarle un corte de pelo, y cerró con una invitación al aire para comer empanadas.
Ortiz fue consultado por las referencias que le dieron del club figuras como Iván Zamorano, a lo que comentó: “Le he agradecido a la gente que me ayudó y respondió mis mensajes. A todos los he invitado a comer asadito”. Tras ello, el DT argentino esbozó la posibilidad de comer con la prensa.
“Me va a salir caro con todos ustedes (un asado). Acá me están diciendo empanadas, voy a pagar empanadas para que podamos comer”, cerró entre risas Fernando Ortiz.

Mentalidad clasiquera y exceso de puntualidad
El primer partido de Fernando Ortiz como DT de Colo Colo tendrá como rival a Universidad de Chile, club al que se enfrentará el próximo 14 de septiembre en el marco de la Supercopa. El trasandino sabe que el desafío es importante, pero dejó en claro su postura sobre este tipo de partidos.
“Se nos viene una copa súper importante, donde hay que ganarla también. Soy de la idea que los clásicos se ganan, no importa cómo se juegue”, comentó Ortiz.
En torno a su forma de trabajo, el entrenador del Popular adelantó que sus jornadas comienzan muy temprano y que siempre busca mantener la línea de la cordialidad, independiente del resultado mostrado en cancha.
“Me gusta llegar temprano. Con Paolo, mi preparador físico, somos de recorrer las canchas muy temprano (...) Soy un ser humano tranquilo. Me van a ver así siempre, saludo a todo el mundo porque el respeto está ante todo", comentó.
“Van a decir: ‘perdiste, no vas a hablar’. No, al contrario, voy a ir a saludar de nuevo a todos porque un resultado no me va a marcar como persona”, finalizó.