Juan Guillermo Castillo tuvo un fugaz paso por Colo Colo en 2011, pero pese al poco tiempo que estuvo en el Estadio Monumental, vivió momentos bastante complejos. Esto no solo porque deportivamente el equipo no pasaba por su mejor momento, sino que también por los constantes cambios de técnicos que hubo en la época.
El charrúa estuvo bajo las órdenes de Diego Cagna, Luis Pérez, Américo Rubén Gallego, Marcelo Ramírez e Ivo Basay. Con este último tuvo una relación bastante tensa, tanto así que casi llegan a los golpes en una reunión junto a los directivos, lo que marcó el adiós de Castillo.
En vez de que un tercero cuente la historia, es mil veces mejor que el mismo protagonista entregue detalles. Juan Castillo conversó con En Cancha, aclarando todas las dudas y, a su vez, graficando los motivos que llevaron a este desencuentro.
Juan Castillo y su relación con Ivo Basay
Primero hay que contextualizar que, por esos años, el Campeonato Nacional se jugaba con Apertura y Clausura, dividiendo el año en dos. Ivo Basay llegó el segundo semestre con la misión de levantar a un alicaído Colo Colo. Y lo logró, pues quedaron terceros en la tabla y se metieron en play-offs, pero en esta instancia se quedaron en semifinales después de perder ante Cobreloa.
Lee también: El Monumental de Colo Colo se moderniza: anuncian importante implementación para 2026Con este panorama por delante, Basay decidió rearmar el plantel y, uno de los elegidos para salir fue Juan Castillo, a quien le había prometido seguir en 2012. Sin embargo, todo lo planteado cambió en un abrir y cerrar de ojos.
- ¿Cómo era su relación con Ivo Basay?
Con Ivo al principio estaba todo espectacular y después del Superclásico que empatamos dos a dos, en el que íbamos ganando y me expulsan mal en ese partido, me mandó toda la responsabilidad de ese resultado, siendo que nosotros estábamos ganando dos a uno cuando estábamos once contra nueve. En una jugada fortuita nos empatan el partido, siendo que yo no tuve nada que ver.
- ¿Ahí comenzó todo este problema?
Claro, pero no es lo único. Yo había tenido una conversación previo a ese clásico con él, en la que me había manifestado personalmente que quería que yo continuara, que él necesitaba un arquero de nivel para el año que viene (2012). Después de eso, la situación cambió completamente. Desde mi punto de vista no fue leal con sus palabras.
- ¿Eso fue lo que lo sacó de Colo Colo?
Yo manifesté en reiteradas oportunidades que tenía el deseo de renovar, de hecho, había hablado con (Jaime) Pizarro también en cuanto a la renovación y bueno, no se pudo dar como esperaba.
- También se debe haber analizado su rendimiento, ¿no?
Obviamente que en el análisis global de ese año, quizás tuve mis idas y vueltas, mis buenos partidos, mis malos partidos, como todos. Y obviamente que en la generalidad, cuando estás en un equipo grande, tienes que justificar un poco más, quizás en el setenta u ochenta por ciento de los partidos debes rendir excelente para tener la posibilidad de renovar.
- Su rendimiento estuvo a la altura en los meses que jugó...
Siento lo mismo. Yo me había ilusionado con esa conversación que tuve con Ivo y, básicamente, solo faltaba ponernos de acuerdo con la dirigencia, porque yo sabía que iba a tener un gran rendimiento en el siguiente año. Obviamente, siempre te cuesta un poco la adaptación y luego de todo ese 2011, me sentía listo para mostrar mi mejor nivel.
De hecho, cuando vuelvo y arreglo con Liverpool en Uruguay, casi salimos campeón y fui el mejor golero de fútbol uruguayo en ese semestre. O sea que yo sabía que iba a pasar eso después, pero bueno, lamentablemente me tuve que volver y no seguir en ese lugar privilegiado que es Colo Colo.
- ¿Quedó decepcionado de Ivo Basay?
Completamente, nunca me esperé que actuara así conmigo. Yo me sentí muy respaldado en su momento, pero cambió todo drásticamente. Esto comenzó cuando estábamos en un doble horario, almorzando ahí en el Monumental y yo me estaba levantando para seguir con mi rutina. Me levanto y me dice ´Juan, ven que quiero hablar contigo’. Y bueno, me quedé. Ahí Ivo me dice ‘el presidente (Hernán) Levy me comentó que termina tu contrato a fin de año, hablemos de eso’.
Ahí es cuando me comenta que su intención era que me quedara, ya que me consideraba un golero de alto nivel para Colo Colo, que esto y lo otro, me llenó de elogios. Le digo que yo quiero seguir en el club. Incluso en ese momento me dice ‘bueno, vamos a hablar con (Jaime) Pizarro y vamos a avanzar con la renovación’.
- Iba todo viento en popa...
Era todo soñado, pero acá comienzan los problemas. Conversé con Pizarro después de hablar con Ivo y me dice que van a esperar entrar a los play-offs para ver renovaciones, a lo que espero paciente porque sabía que mi rendimiento estaba a la altura, o al menos eso me habían hecho sentir. Ahí empezamos a cerrar el tema y quedaba esperar lo que pasara en las últimas fechas.
- Luego viene la expulsión en el Superclásico, ¿no?
Así es, una expulsión que cambió todo lo que había conversado con Ivo. Fue, creo, que un partido antes de clasificar a los playoffs y después ganamos el siguiente. A mí me sacó el siguiente partido contra O’Higgins y no volví a jugar más, quedando Francisco Prieto como el arquero titular.
Después quedamos fuera de los Play-offs con Cobreloa en semifinales y el club nos licencia una semana. Volvemos a entrenar y ahí Ivo nos llama a la oficina. Bueno, estaban los dirigentes y todo el cuerpo técnico, ya que querían conversar con Andrés (Scotti) y conmigo sobre nuestro futuro.
- ¿Qué les dijeron en ese momento?
Ahí nos comunican que no íbamos a renovar el contrato. Ivo nos dijo, en textuales palabras: ‘Miren muchachos, como técnico, a mí me gusta ser frontal con el jugador. Me gusta decir las cosas directamente a la cara y bueno, en este caso yo voy a ser frontal con ustedes. Yo no los voy a tener en cuenta para el año que viene´
Siempre está dentro de la posibilidad de que alguien te diga eso, y está en todo su derecho, pero no corresponde cuando me había dicho otra cosa. Entonces ahí se comenzaron a caldear los ánimos y se desarrolló una discusión fuerte entre ambos.
- ¿Cómo encaró a Ivo Basay?
Él preguntó si teníamos algo para decir, Andrés le dijo que no tenía nada más que agregar, que estaba todo bien, pero yo hice todo lo contrario. Yo le digo ‘disculpa, yo sí tengo algo para decirte, porque a mí -se lo dije delante del presidente, delante de todo el cuerpo técnico- me comentaste que iba a renovar, que me quedara tranquilo...me llamaste personalmente y me dijiste eso. Ahora me estás diciendo que no voy a seguir, no fuiste leal conmigo, te lo digo en la cara. Y ahí él se puso un poco bravo, se enojó porque lo estaba confrontando.
- ¿Llegaron a los golpes?
Era una situación realmente incómoda. Si bien no pasó, podría haber llegado fácilmente a malos términos, incluso a los golpes, pero bueno, todo quedó ahí. Íbamos saliendo cuando Ivo me dice ‘cuando yo te saqué, te quedaste fuera del equipo y no te importaba nada’, me dijo de todo.
Ahí me tiró todos los dardos, pero tampoco se lo aguanté. Le dije que no se confundiera, lo más calmado posible, porque estaban las cosas como para haber generado una situación violenta, pero me controlé y me fui.
- ¿Fue lo último que habló en Colo Colo?
Para nada, ya que después me acerqué al presidente Levy y le digo que quería hablar con él para aclarar toda la situación, porque me había parecido que fue algo complicada y nunca me fui mal de un equipo, por lo que no quería que fuera Colo Colo el primero. No me quería ir mal como persona, capaz que en la parte deportiva no estuve a la altura, pero lo que dijo Ivo es mentira y le puede preguntar a cualquiera de mis compañeros, al cuerpo médico, al utilero, a ver cómo yo me comporté a partir de que él me sacó del equipo.
- ¿Nunca le falló al equipo en ese sentido?
Jamás, tampoco se me pasó por la cabeza hacer algo así. Siempre estuve en el equipo, incluso cuando tomó la decisión de no ponerme más. Yo estuve en el banco, siempre apoyando a mis compañeros. De hecho, esto mismo le dije al presidente, quien me dio a entender que sabían que no era 100% real lo que decía Ivo, pero que el cuerpo técnico había tomado una decisión y poco se podía hacer en ese aspecto.
- Han pasado los años, ¿pudo aclarar esto con Ivo Basay?
No, no he tenido la posibilidad de cruzarme con él. Obviamente, no tengo problema de, si me lo cruzo, charlarlo. No soy rencoroso ni nada que se le parezca, simplemente yo digo las cosas como fueron, sin importar quedar mal con nadie, no miento. Si está la posibilidad de aclararlo, no pasa nada, se aclara, pero las cosas sucedieron así. Como te estoy contando y no me gustó para nada.
