
Con 1.96 de estatura y calificado como promesa en las inferiores de Universidad Católica, Martín Ballesteros llegó en 2023 a Colo Colo.
Con solo un par de partidos en el Cacique, el año pasado se fue a préstamo a Unión Española, mientras que el 2025 que termina, hizo lo propio en Unión La Calera. Sin embargo, el joven golero no ha podido sumar mucha experiencia en partidos oficiales. En los Cementeros, de hecho, no disputó ningún compromiso la última temporada.
Para el 2026 no está en los planes de Fernando Ortiz, por lo que deberá volver a buscar equipo donde pueda sumar. Una realidad que, aunque lo golpea un poco, se toma con madurez.
Lee también“Exámenes listos”: Colo Colo le cumple a Fernando Ortiz y tiene segundo refuerzo para el 2026En entrevista con En Cancha, el guardameta habló de su sentir tras no sumar muchos minutos en el profesionalismo, donde dice, no se lo toma para mal.
Ballesteros: “Siempre me ha tocado luchar desde atrás”
- En Unión Española no lograste jugar mucho y este año en La Calera no pudiste debutar, aunque siempre fuiste a la banca. ¿Han sido pasos buenos en tu carrera?
Sí, claro. Pasar de ser tercer arquero en un equipo de Primera División a ser segundo, es otra responsabilidad. Uno entrena de otra forma. Cuando uno es tercer arquero se queda fuera de ciertos trabajos, sobre todos los de futbol. O cuando se hacen partidos amistosos, uno no entra. Entonces estar de segundo arquero es otra responsabilidad, siempre me lo tomé de muy buena forma. Esperando mi oportunidad.
- ¿Y cómo se convive con la ansiedad de querer jugar?
El proceso de un arquero es distinto al de otro jugador. Es más largo, donde hay que tener mucha paciencia. A mí, en general, a lo largo de mi carrera no me han tocado muchas situaciones fáciles. Siempre me ha tocado luchar desde atrás. Entonces, no es algo que no esté acostumbrado. No me quita la calma, la paciencia o la gana de trabajar. Obviamente que a uno le gustaría ser titular en el equipo que fuera, pero yo me lo tomo con mucha calma y responsabilidad. La verdad, es que no estoy loco por jugar. Para mí es lo más importante ahora, el próximo año, poder sumar la mayor cantidad de minutos posible. 15, 20 partidos, para arriba. Pero tampoco es que me esté volviendo loco por no jugar.
- En Colo Colo te tocó debutar en un amistoso con River Plate, mientras que en Unión Española fue por los puntos. Pero luego de ambas experiencias no volviste a tener oportunidades, ¿te esperabas algo diferente?
Yo siempre me lo tomo todo con tranquilidad, confiando en el trabajo que hago. Estoy entrenando un montón, me quedo después de entrenar en los clubes, me pago un gimnasio carísimo para hacer doble jornada. Siento que en algún momento mi trabajo va a dar frutos y por eso tengo tranquilidad. No estoy desesperado porque lleguen los resultados, porque yo en el fondo sé que algún día van a llegar. Las oportunidades que he tenido siento que lo he hecho bien; quizás no estoy haciendo suficiente para que me den la confianza de ser el primer arquero de un equipo todavía, pero mi oportunidad va a llegar y el día que me toque agarrar un arco, no lo voy a soltar más.

- ¿Cómo ha sido el apoyo de tu familia en estas distintas experiencias? Tuviste la oportunidad de irte a EE.UU. a estudiar y jugar, pero apareció lo de Colo Colo. ¿Te apoyaron en esa decisión?
Mi familia siempre me ha apoyado incondicionalmente. Mi papá, mi mamá, mis hermanos, mis tíos, todos. De hecho, este año fue el primero que me tocó irme fuera de Santiago, y también fue un desafío estar lejos de la familia, de mi polola. Y en ese sentido también, siempre que podía los trataba de ir a ver, o ellos me veían en todos los partidos. Siempre me acompañan, mi papá me ha seguido por todo Chile. Me he sentido súper acompañado y respaldado. Por eso digo que no tengo ese apuro por demostrar, porque ellos confían en mí y en el proceso que estamos haciendo, porque al final ese camino se hace con la familia, que deben respetar mis comidas o porque intento cuidarme lo más que puedo. Y ese apoyo ha sido fundamental, lo han hecho desde que tengo 7 u 8 años, cuando empecé a jugar en Barnechea y luego en Católica. Nunca me han faltado, son lo mejor que me ha podido pasar.
Cómo ve el fútbol Martín Ballesteros
A sus 23 años y con una formación importante en dos de los equipos grandes de nuestro país, Martín muestra de inmediato una diferencia con otros colegas de su edad.
Fanático del fútbol, dice que lo consume bastante, a diferencia de las nuevas generaciones, donde en el boca a boca parece que los jóvenes no ven muchos partidos.
Visión lejana para el portero, quien además recita a la perfección la realidad de los clubes europeos y los arqueros con los que se identifica.
- Hoy se dice que el futbolista ve menos partidos, o los más jóvenes ya no juegan tanto en el barrio. Menos pichangas y más esquematización ha sido parte de ese debate. ¿Tú cómo eres en ese ámbito?
En vacaciones estoy jugando un poco más de pichangas, en el año obviamente no porque hay que cuidarse. Pero sí, yo soy de ver harto fútbol, me gusta ver el campeonato chileno. En las concentraciones ponen partidos, entonces uno los ve. También la Primera B, fútbol europeo, me gusta mucho ver Copa Libertadores, Champions League... soy un enamorado de la Libertadores, es mi copa favorita.
- ¿Y crees que falta eso, que el jugador chileno vea más fútbol, o no es tan así?
Yo creo que es más mito, porque al menos, en mi experiencia, mis compañeros estaban en todos lados con el iPad, con el teléfono, viendo fútbol; sobre todo este año en Calera. Muchos de ellos veían el Ascenso, estaban todos muy atentos al fútbol en general.
Lee tambiénEran 3 ventas seguras y hoy están estancados en Colo Colo: han llegado cero ofertas al Monumental- ¿Y hay un arquero con el que te sientas representado, que te guste como juega o te identifiques con él?
Me gusta mucho cómo juega (Thibaut) Courtois. Lo encuentro notable, también (Gianluigi) Donnarumma. Son dos arqueros a la antigua, que son atajadores, que te ganan partidos así, esos me vuelven loco. También Alisson, lo encuentro muy bueno, ha hecho un papel extraordinario. Lleva varios años ahí metido y ahora le trajeron a otro que es fuerte, Giorgi Mamardashvili. No me acuerdo si jugó un Mundial o una Europa, que anduvo súper bien. Y no lo ha podido sacar, es extraordinario.
- Hoy ya se instaló eso de tener dos arqueros igual de competitivos.
Acá en Chile también. Si tú te fijas, en los equipos grandes, todos tienen dos arqueros experimentados. Al final es lo que se necesita para apretar al otro. Hay pocos equipos que tengan porteros muy jóvenes. Calera este año se la jugó en eso, estaba Jorge (Peña) que tiene 25, yo con 23 y después el tercero, Benja Astudillo, que tiene 18. En ese sentido, también nos fuimos potenciando entre nosotros, trabajando muy bien.







