Una indignante situación se vive en el fútbol italiano. Más específicamente en la rama femenina del Lucchese, conjunto que actualmente milita en la Serie C del sistema de torneos de la Península. Unilateralmente, la dirigencia del club decidió dejar de pagarle su sueldo y apartar del primer equipo a su arquera Alice Pignagnoli.
¿La razón para tan radical medida? La jugadora le comunicó a la dirigencia que estaba embarazada y solo por eso el club decidió dejar de pagarle.
- Lee también: La Roja Femenina se llena de dudas a dos meses del repechaje: cae por goleada ante el País Vasco
Pignagnoli, de 34 años de edad y que espera su segundo hijo, tiene una vasta trayectoria en el fútbol italiano, con pasos entre otros, por el Cesena, Reggiana y el AC Milan. Su momento de máximo esplendor fue en 2011 cuando con Torres, un elenco de Cerdeña, conquistó la Super Copa de Italia.
La portera utilizó su cuenta de Instagram para denunciar la situación. "Han sido meses muy difíciles. Estar lejos del campo es, para mí, siempre un duelo en toda regla. Entonces, en contra de mis expectativas, encontrarme con un club hostil como el Lucchese, que me perjudicaba como mujer, madre y deportista, me creó una herida profunda. Me sentía sola, inútil, incapaz, un juguete viejo que había que tirar", develó.
Alice Pignagnoli: "Me echaron del equipo sin decir una palabra"
La futbolista expresó que tantos sus compañeras de equipo como el cuerpo técnico tuvieron una muy buena recepción a la noticia y responsabilizó exclusivamente a la dirigencia del club. "El entrenador y las chicas fueron fantásticos, pero el club me dijo que ya no me pagarían a pesar de lo que estaba escrito en el contrato. Poco a poco me empezaron a excluir del equipo. Me pidieron que devolviera el material deportivo, a pesar de mi contrato hasta final de temporada, luego que liberara mi lugar para dormir y me echaron del equipo sin decir una palabra", denunció.
La deportista comparó lo vivido en esta ocasión con su experiencia en el Cesena, cuando tuvo a su primer hijo. En esa oportunidad, el club le renovó contrato a los siete meses de embarazo.
