
Huachipato es el primer finalista de la Copa Chile 2025. El cuadro Acerero dejó en el camino a Audax Italiano tras dar vuelta la serie y jugará el partido decisivo del tradicional certamen del fútbol chileno contra Deportes Limache o Deportes La Serena.
Una de las características que más ha distinguido al equipo sureño es su capacidad formadora. Desde Talcahuano han surgido innumerables talentos que han jugado tanto en el extranjero como en la Selección Chilena. Uno de ellos es Juan Abarca.
En conversación con En Cancha, el exzaguero acerero y actual jugador de Provincial Osorno, repasó con nostalgia y orgullo sus años en el club.

El recuerdo que tiene Juan Abarca de Huachipato, finalista de Copa Chile
“Fue una etapa muy linda. Todas mis etapas en el fútbol han sido lindas, a pesar de los malos momentos. He sido agradecido del club que me formó. Fueron mis primeros pasos, donde tuve la oportunidad de debutar en el profesionalismo y mostrarme para llegar a la selección menor y luego a la adulta”, recordó Abarca.

El exdefensa también valoró la importancia que tuvo su traspaso en el desarrollo de la institución. “Siempre lo he dicho a modo de broma con amigos: con mi venta a la U ayudé a construir el estadio. Con Carlos Labrín nos vendieron en ese momento y usaron parte de esos recursos para la obra, según nos contó el mismo gerente. Tuve la posibilidad de salir dos veces campeón de Chile a nivel formativo con Huachipato. Hay mucha gratitud hacia el club”, añadió.
Abarca destaca que, en su época, el club funcionaba con un espíritu familiar y un trabajo muy profesional en la formación de jóvenes. “Antes el club deportivo era como una familia. Se trabajaba con mucho cuidado hacia el jugador. Había futbolistas de todo el país: del Biobío, del norte y del sur. Edson Puch, por ejemplo, se formó en Huachipato siendo de Iquique. Para mí, sin desmerecer a los demás, era por lejos el mejor club formador”, sostuvo.
El exseleccionado nacional también destacó la enorme cantidad de futbolistas que surgieron y fueron transferidos desde el equipo sureño.
“De mi camada, dos años antes y dos después, salieron jugadores como Pedro Morales, Gonzalo Jara, Rodrigo Millar, Héctor Mancilla, Nery Veloso, Dagoberto Currimilla, Carlos Labrín, David Llanos, Juan Carlos Espinoza, Andrés Vilches y Lorenzo Reyes”, repasó.
Posteriormente, dijo: “No solo pasamos por el club, sino que fuimos vendidos, dejando recursos para la institución. Después vinieron otros como Bryan Vejar, entre varios más”.
“Eso habla de lo bien que se trabajaba y de las oportunidades que se les daba a los jóvenes. En los equipos grandes a veces hay buenos jugadores que no juegan, pero en Huachipato era distinto: si estabas preparado, jugabas. Y si rendías, los grandes como Colo Colo, la U o Católica te querían comprar. Huachipato cumplía su parte”, cerró el defensor.