Solo un paso más le resta a Coquimbo Unido para consagrarse en la Liga de Primera. Los Piratas vencieron a O’Higgins en Rancagua y quedaron a solo un triunfo de bajar su primera estrella.
La gran figura del triunfo de los Aurinegros fue Diego Sánchez, portero que tapó un penal en los descuentos del encuentro, lo que permitió mantener la ventaja mínima para su elenco en el marcador.
Tras el pitazo final, el Mono conversó con TNT Sports, donde aprovechó de contar la clave se su atajada, señalando que para él era vital que el pateador fuera Bryan Rabello.
“Para mí era importante que lo tirara Bryan (Rabello)”, comenzó diciendo. “Le quité la pelota a (Martín) Sarrafiore y se la pasé para que lo pateara él”, añadió el guardameta.
Asimismo, el arquero valoró la entrega de sus compañeros, dejando en claro que el desafío ante los Celestes no era nada sencillo. “Lo luchamos porque ellos estaban invictos acá, estamos para romper los esquemas. Seguimos humildes y felices por este pasito que dimos”, dijo.
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La ansiedad de Diego Sánchez
Si bien a estas alturas parece casi imposible que alguien le arrebate a los Piratas el torneo, la ansiedad de bajar cuanto antes la primera estrella en la historia del club inunda día a día a un Diego Sánchez que espera cuanto antes el final.
“En la semana lo paso como el hoyo, estoy muy ansioso porque quiero que esto termine pronto”, indicó el siempre carismático futbolista.
Para terminar con la espera, Coquimbo Unido simplemente deberá vencer a en su próximo partido en el Campeonato Nacional, en el que se medirán ante Unión la Calera el próximo domingo 2 de noviembre en el Estadio Francisco Sánchez Rumoroso.
