Exactamente once años atrás, Cruzados SADP, la sociedad anónima que se hizo cargo de los destinos administrativos y financieros de la UC, salió a la Bolsa de Comercio de Santiago a transar el 80% de su patrimonio.
Así, una nueva directiva y forma de gobernar y administrar el club se dejaba caer en San Carlos de Apoquindo, para hacerse cargo de la rama de fútbol de uno de los elencos más grandes del país.
"Era una etapa nueva, mucha incertidumbre por la llegada de una sociedad anónima. Todos preguntándose qué iba a pasar, especialmente los hinchas y los trabajadores, porque no se sabía hacia dónde se iba, porque no teníamos experiencia previa, y ellos tampoco", recordó Rodrigo Valenzuela, quien fuera campeón con la Católica en 2010, en diálogo con Planeta UC.
Sin embargo, añade, pese a tratarse "de un proceso duro, fue el comienzo de todo lo de hoy. Cruzados mantuvo la esencia de Universidad Católica, y también su historia".
Ha pasado más de una década desde aquel desembarco de nuevos nombres en las oficinas del club, y los resultados deportivos hoy se pueden ver. Los cruzados siguen con vida en la Copa Sudamericana, y están cerca de abrochar un histórico tricampeonato para la institución.
"Todos los cambios vienen con secuela. Fue difícil en su momento, pero nos logramos estabilizar. Con el pasar de los años se vio el proceso a largo plazo que tiene el club. Además se integró un presidente (Juan Tagle) que es súper cercano con el hincha, y eso habla bien de lo que se está haciendo. Hay que seguir por ese camino. Hay gente muy identificada con la institución, que trabaja de corazón, y eso a la larga trae resultados", añadió Jorge Ormeño, histórico volante cruzado, en el mismo espacio.
