La UC debutó con un ajustado triunfo en Chillán, derrotando a Ñublense por 1-0 en el Estadio Nelson Oyarzún, no jugando de manera descollante pero sí sacando la tarea adelante, sobre todo en una cancha que dejaba mucho que desear.
Pero más allá de la victoria, quedó en la retina de todos un error involuntario, pero que de todas formas encendió las alarmas posteriormente en San Carlos de Apoquindo: el ingreso de Carlos Salomón con el número "4" en su espalda, cuando en la planilla figuraba con la "3".
Luego del cotejo, existía la preocupación de un castigo contra el tricampeón del fútbol chileno que, incluso, pudiera terminar con la resta de puntos. Sin embargo, a lo único que se exponen en "La Franja" es a una pequeña multa económica y hoy la ANFP tomó la decisión de lo que finalmente hará con los "Cruzados".
En definitiva, el ente rector del fútbol chileno decidió citar a un representante del club el próximo martes 6 de abril, con la intención de que cuente su versión del origen de este descuido.
En todo caso, el recientemente modificado artículo 36 de las bases del Campeonato Nacional contempla sólo "una multa de hasta 20 UF (unos 600 mil pesos, aproximadamente), según la estimación que efectuare el Tribunal Autónomo de Disciplina", por lo que la quita de puntos está absolutamente descartada.
El otro tema que atañe a la Universidad Católica es la situación de Diego Poyet, hijo del técnico Gustavo, que además las oficia de ayudante y analista de su padre. Él fue expulsado en el duelo ante los "Diablos Rojos", por lo que deberá cumplir un partido de suspensión, no pudiendo estar presente en el choque ante Palestino, este domingo a las 19:15 en San Carlos de Apoquindo.