La fría despedida de la UC a Thomas Gillier: “No es lo que esperábamos como institución”

Mientras Universidad Católica busca comenzar una nueva etapa con la llegada de Daniel Garnero como entrenador, en paralelo se concretó una baja sensible para el futuro del club. Este jueves, Cruzados oficializó la salida del arquero Thomas Gillier, quien decidió no renovar su contrato y partirá como agente libre al fútbol europeo.

A través de un comunicado, el club lamentó la decisión del joven portero de 20 años, quien informó que no continuará en la institución y que seguirá su carrera en el extranjero. Según se indicó, Gillier permanecerá entrenando con el plantel hasta el 30 de junio, fecha en la que finaliza su vínculo contractual.

“Thomas Gillier nos comunicó que no continuará en la institución y seguirá su carrera en el extranjero”, comenzó diciendo el comunicado publicado en las redes sociales del club.

“La decisión comunicada por Thomas no es lo que esperábamos como institución y lamentamos la partida de un jugador que desde muy pequeño comenzó su vínculo formativo con Universidad Católica”, expresaron.

“Solo nos resta desearle éxito a Thomas en lo que vendrá próximamente”, concluyó el mensaje que dejó opiniones divididas entre los hinchas. Mientras algunos cuestionaron el actuar de la dirigencia otros criticar la decisión del jugador.

Tal como adelantó En Cancha hace algunas semanas, desde la dirigencia de la UC hicieron esfuerzos importantes para que Gillier no se marchara sin dejar réditos económicos. Se le ofreció una renovación por tres años, es decir, hasta mediados de 2028, sin embargo, el portero optó por no firmar.

Pese a que la partida era prácticamente un hecho, la intención del club era asegurar al menos una futura venta, lo que finalmente no se concretó.

El talentoso guardameta formado en San Carlos de Apoquindo firmó un precontrato con Bologna de Italia, escuadra con la que estará vinculado hasta junio de 2030, con opción de extender por un año más. Sin embargo, su primer destino no será Europa.

El guardameta será cedido por una temporada al Montreal de la MLS (que comparte dueños con el Bologna), donde buscará sumar minutos antes de intentar dar el salto definitivo a la Serie A.

Con esta salida, Universidad Católica pierde a uno de sus proyectos más prometedores bajo los tres palos, justo cuando comienza un nuevo proceso con Garnero en la banca.