“Luego de 14 años vinculado a la Universidad Católica, toca despedirme y sólo tengo palabras de agradecimiento a todos los que conforman esta gran y hermosa institución“. Esas fueron las declaraciones de Carlos Salomón en diciembre de 2024, cuando expiró su contrato con los Cruzados y se le comunicó que ya no lo necesitaban más.
El central, que perteneció a Barnechea esa temporada y que sufrió en carne propia la resta de puntos y la revocación de la licencia de clubes por parte de la ANFP, hoy vive un inesperado renacer en la misma categoría.
Es que el defensor, hoy de 25 años, se ha vuelto un inamovible en la zaga de Deportes Copiapó, que de la mano de Hernán Caputto goza de la punta del torneo en Primera B con 32 unidades, al igual que San Marcos de Arica.
Entre el Torneo de Ascenso y la Copa Chile, Salomón ha jugado 22 encuentros con la camiseta del León de Atacama, recuperando 9 balones de media por partido, lo que lo hace hoy ser considerado una de las grandes figuras de la categoría de plata del fútbol chileno.
Los números de Carlos Salomón en Primera B
Patiperreando lejos de la UC
La negativa de Tiago Nunes -por entonces técnico de Católica- a considerarlo en el plantel fue clave a la hora de definir el destino de Salomón en San Carlos de Apoquindo.
Entre 2020 y 2021, el central vistió en 16 oportunidades la camiseta cruzada, pero nunca tuvo una oportunidad real de jugar de manera constante, por lo que tuvo que ir a buscar chances a otros clubes.
Así fue como el espigado defensor encontró alternativas en Santiago Morning, Deportes Santa Cruz, Barnechea y hoy Deportes Copiapó, donde espera coronar todo, por qué no, con un ascenso directo a la Primera División 2026.
