
Fue un momento dramático el que se vivió el domingo en el Claro Arena. En plena celebración de despedida para tres capitanes históricos de Universidad Católica, José Pedro Fuenzalida, Cristián Álvarez y Milovan Mirosevic, el exarquero cruzado Patricio Toledo se desplomó en plena cancha.
Preocupación máxima en los asistentes al estadio, también en los miles que veían la fiesta por TV y, por supuesto, quienes se enteraron rápidamente en redes sociales.
Con el pasar de los minutos se supo que el ex seleccionado chileno había sufrido un infarto -muerte súbita-, fue reanimado en el mismo césped del recinto y trasladado de urgencia a una clínica cercana.
72 horas fundamentales para Patricio Toledo
En el Claro Arena se siguió segundo a segundo el estado de salud de Toledo y, una vez conocido el primer informe sobre la situación del exfutbolista, se comunicó al público asistente que Pato estaba “despierto y consciente”.
Había sido estabilizado, en resumidas cuentas, pero desde el propio centro asistencial advirtieron que el deportista seguía en estado grave.

Toledo fue intervenido quirúrgicamente para destapar la arteria que provocó el accidente coronario y hasta ahora se mantiene en una situación de cuidado.
Así lo confirmó la esposa del ex futbolista, Ely Serrano, quien comentó: “Salió de pabellón. Hay 72 horas para que salga de su estado crítico”.

“Tuvimos un susto muy grande”
Lo sucedido a Toledo provocó terror en los asistentes al Claro Arena. El ex mediocampista de La Franja Gerardo Reinoso, quien también estuvo invitado a la celebración, relató cómo fueron esos minutos en que Toledo estaba desvanecido en el césped del estadio.
En Radio ADN, La Vieja relató: "Fui el primero que corrí. Me salió al verlo así darle respiración boca a boca, creo que Cristian Álvarez le hacía masajes en el corazón, tuvimos un susto muy grande, hasta que después de un tiempo volvió a respirar y llegaron los médicos... Seguimos con la reanimación y volvió a respirar de nuevo hasta que lo llevaron al hospital”.