
Tres partidos en el Claro Arena y un promedio de 17.798 espectadores. Ese es el saldo de la Universidad Católica, hasta ahora, en su nuevo reducto. Nada mal, por supuesto, pero en Cruzados aspiran a más: quieren la casa llena para absolutamente todos los encuentros.
¿Qué ocurre? Resulta que el sistema de abonados le ha estado provocando un pequeño dolor de cabeza al club. Claro, quien paga por adelantado su ticket para todos los encuentros, tiene derecho a ir cuando se le plazca, pero ahí está el problema, ya que ese hincha, bastante selectivo, muchas veces no aparece por el estadio cuando las condiciones -muy variadas, por cierto- son desfavorables.
La actual base de 14 mil abonados demostró, por ejemplo, no asistir lloviera o tronara al Santa Laura, y ahora en el Claro Arena, con capacidad para 20 mil personas cómodamente sentadas, la tónica amenaza con mantenerse.
Según información de En Cancha, en Cruzados analizan una fórmula para hacerle frente a la compleja reasignación de tickets entre hinchas, que incluso muchas veces no llega a concretarse, ya que si un abonado no puede o no desea asistir, prefiere perder el dinero.

¿De qué se trata? De un sistema que premie la fidelidad cuando se vuelva a abrir el proceso de abonos para la próxima temporada -a finales de año e inicios del siguiente-, donde la prioridad para renovar la tengan los seguidores cruzados que tengan un 80% o más de asistencia a los compromisos en el Claro Arena.
Con esta medida -todavía en estudio en San Carlos de Apoquindo- se pretende asegurar que los abonados estén incentivados a no fallar nunca en condición de local, y dejar 6 mil entradas disponibles para venta general, como se ha venido haciendo hasta ahora.

Lo que le queda a la UC en el Claro Arena este 2025
- Fecha 25: U. Católica vs. U. de Chile
- Fecha 26: U. Católica vs. O’Higgins
- Fecha 28: U. Católica vs. Palestino
- Fecha 30: U. Católica vs. Unión La Calera