
La Universidad Católica cerró un 2025 con un grato sabor de boca. Y claro, si logró la clasificación a Copa Libertadores en la última fecha del torneo, y se irá de vacaciones sabiendo que el 2026 se vendrá muy, pero muy recargado.
Lo que le hace ilusión a los Cruzados es que, además de volver a disputar el torneo más importante de América, lo hará en su renovado Claro Arena, que en el Campeonato Nacional ya demostró ser una localía importante: apenas una derrota en siete partidos disputados (la única caída fue con O’Higgins).
“Seguramente nos haremos muy fuertes ahí de local. Ya estamos pensando en el año que viene, en Copa Libertadores, en pelear el torneo, que es importante. Este año no se pudo porque Coquimbo lo hizo de una gran forma y no nos dio posibilidades”, dijo Fernando Zampedri en la Gala del fútbol chileno.

“Católica se tiene que reforzar”
Luego, el Toro le dejó un mensaje a la dirigencia: para pelear afuera, el conjunto de Daniel Garnero sí o sí debe traer caras nuevas la siguiente temporada.
Lee tambiénMercado de fichajes en directo: últimas novedades de Colo Colo, la U, la UC y el fútbol chileno“Seguro que Católica se tiene que reforzar. Ahí están los dirigentes que harán su trabajo. Ya el club sabe lo que es competir en el plano internacional, así que lo dejamos en manos de la institución”, cerró.
De momento, Cruzados se mueve en el tema renovaciones, donde aún faltan por estirar su vínculo Jhojan Valencia, Agustín Farías, Tomás Asta-Buruaga, Eugenio Mena y Clemente Montes.







