Tras el término de la campaña 2025 y antes del comienzo de la pretemporada (5 de enero), la dirigencia de Cruzados comenzó a trabajar en la búsqueda de refuerzos y pareciera que la primera contratación ya es inminente.
El primer fichaje de Universidad Católica para 2026 sería el defensor Bernardo Cerezo, quien terminó su contrato con Ñublense. Naturalmente, su contratación supone un aumento en la competencia por ser el lateral derecho titular en el esquema de Daniel Garnero.
El debate que provoca la llegada de Cerezo
Bernardo Cerezo estuvo durante los últimos cinco años de su carrera defendiendo los colores de Ñublense, donde disputó Copa Libertadores y Sudamericana, siendo titular a lo largo de todas las temporadas.
Su llegada supone una inyección de experiencia en una zona del campo donde el titular fue Sebastián Arancibia, pero una lesión provocó que viera el final de la temporada desde fuera de la cancha.
Lee también:La UC alista su primer refuerzo: es mediocampista y firmará por un añoCon la inminente llegada de Cerezo, Daniel Garnero tendrá una férrea lucha entre dos futbolistas con nivel suficiente para ser titular a lo largo de la temporada 2026, donde la UC jugará cinco torneos; Liga de Primera, Copa Chile, Copa de la Liga, Supercopa y Copa Libertadores.
En temas estadísticos, si comparamos a ambos laterales durante este 2025, los números favorecen ampliamente al ex Ñublense, ya que tuvo más partidos jugados, asistencias, mejor promedio en pases clave por partido, recuperaciones, quites y efectividad en los duelos.
A falta de la oficialización por parte de Cruzados, el cuerpo técnico contaría con ambos laterales para 2026, además de Tomás Asta-Buruaga, quien ofició como lateral derecho en el cierre de la campaña de la UC y que en estos momentos tiene avanzadas negociaciones para extender su vínculo. En síntesis, dos o tres nombres para un solo puesto.
