Universidad de Chile atraviesa horas claves con miras al armado del plantel para lo que queda de año. La noche de este jueves finalizará el mercado de fichajes, y en la dirigencia azul siguen en la búsqueda de un delantero.
Aunque corren contra el tiempo, hay una opción que aparece en el horizonte estudiantil que podría darle más tiempo a Azul Azul para complacer a Gustavo Álvarez.
Di Yorio podría abrir un espacio en la delantera azul
Si Universidad de Chile no logra dar con una opción de aquí hasta mañana, todo quedaría en manos de Lucas Di Yorio.
Aunque el delantero se encuentra entrenando junto a sus compañeros, según información de En Cancha lo sigue haciendo con dolores en su rodilla.
La única manera de cortar de raíz su lesión es con una operación, la que lo marginaría por un largo periodo. Si el atacante decide pasar por el quirófano, la U podría recurrir al Artículo 14 de las bases del Campeonato Nacional.
En el escrito, la ANFP otorga un permiso especial a los clubes para inscribir a un futbolista fuera del mercado de fichajes, siempre y cuando se acredite un tiempo de recuperación por lesión de más de 120 días.
Más allá de la documentación, lo más complicado para la U será tratar con Di Yorio. El delantero ya tuvo una conversación con Gustavo Álvarez donde le aseguró que se sentía capaz de soportar el dolor, por lo que no estaba interesado en operarse.
Si en Universidad de Chile no encuentran un refuerzo antes del cierre del mercado, la operación de Di Yorio sería el único camino que le queda a los laicos para la llegada de un delantero que fue solicitado por Álvarez.
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En la U se quedan sin tiempo y opciones
Al margen de la situación de Lucas Di Yorio, las tratativas de la U por conseguir un nuevo nombre en ataque no son sencillas.
Desde la plana mayor de Azul Azul comentan a este medio que buscarán “hasta última hora” un nombre en el mercado que pueda cumplir con los parámetros que pide el DT.
La mayor restricción, además de lo económico, tiene que ver con la nacionalidad. La U no cuenta con cupo de extranjero, por lo que si llega un refuerzo debe ser chileno.
Aunque han llegado diferentes carpetas al Centro Deportivo Azul, lo cierto es que en la escuadra estudiantil tampoco quieren “traer por traer”, por lo que el listado de opciones se acorta drásticamente.
De esta forma, las próximas horas serán claves para la dirigencia de Universidad de Chile, que intentará mover el tablero con miras a un semestre donde las expectativas son altas.
