Con triunfo 1-0 ayer sobre Independiente en el Estadio Nacional, Universidad de Chile dio el primer golpe en los octavos de final de la Copa Sudamericana. El gol de Lucas Assadi encendió la ilusión azul, pero la serie está lejos de cerrarse.
Ahora, Gustavo Álvarez recibirá refuerzos importantes para el duelo en Avellaneda, esto porque Matías Sepúlveda y Maximiliano Guerrero, ausentes en el duelo de ida, preparan su regreso.
La U recupera piezas claves
Ambos futbolistas ya cumplen trabajos de reintegro deportivo tras superar lesiones que los mantuvieron fuera de los últimos encuentros. El volante zurdo dejó atrás un desgarro en el sóleo, mientras que el puntero derecho superó un esguince de tobillo con edema óseo.
De hecho, en el Centro Deportivo Azul no descartan que ambos puedan aparecer este domingo en la citación frente a Audax Italiano por el torneo local, como paso previo para llegar con ritmo competitivo a la definición copera.
De momento, el cuerpo técnico evalúa su inclusión en función de las cargas y la respuesta física en los entrenamientos de estos días. Por el momento, la postura de Gustavo Álvarez indica que no dosificará ante los Tanos.
Un tramo crucial para la temporada de la U
Con el retorno de dos piezas claves, Álvarez contaría con plantel completo para afrontar la que es quizás la fase más desafiante de la temporada. Viene Audax, luego la vuelta con Independiente y tras ello Everton junto a Colo Colo. No hay margen de error y en la Cisterna lo saben.
El retorno de Guerrero devuelve profundidad y velocidad por banda, mientras que Sepúlveda lo propio en el sector izquierdo, donde ante su ausencia ha oficiado como titular Felipe Salomoni.
Por el momento, todo es ilusión en la U. La última vez que el Romántico Viajero ganó el partido de ida en una fase definitoria de un torneo internacional fue en 2011, cuando derrotó a Liga de Quito en Ecuador en la final de la Copa Sudamericana.
El calendario marca una semana complicada, primero Audax en el Nacional el domingo y luego viaje a Buenos Aires el martes. Con el regreso de Sepúlveda y Guerrero, Álvarez podrá acercarse al once ideal que imaginó para este tramo decisivo.
