“No quiero generar polémica”: El fantasma que persigue a Gustavo Álvarez y la U

El entrenador de Universidad de Chile se ha visto afectado por un terrible inicio de segunda rueda.

Universidad de Chile. Gustavo Álvarez. (SEBASTIAN CISTERNAS/PHOTOSPORT/SEBASTIAN CISTERNAS/PHOTOSPORT)

La derrota en el último Superclásico no solo le quitó a Universidad de Chile la chance de pelear el título, también reactivó un trauma que los hinchas conocen demasiado bien: el desplome en las segundas ruedas.

Una sombra que ya se arrastra desde hace años y que hoy, con Gustavo Álvarez al mando, volvió a dejar a los azules lejos del título a falta de de tres meses para el final de la competencia.

De candidato a frustración

El contraste es brutal. En la primera rueda de este torneo, la U terminó tercera con 31 puntos, apenas uno por debajo de Coquimbo Unido. Todo indicaba que Álvarez tenía un plantel competitivo, capaz de sostener la ilusión.

Ahora, la tabla de la segunda rueda muestra a los azules hundidos en la 12ª posición, con solo 7 puntos en este semestre. De soñar con pelearle a Coquimbo Unido —que vuela en la cima con 10 victorias consecutivas— ni hablar.

Una “maldición” repetida

Lo ocurrido este año no es nuevo. En 2023, la U registró en la segunda rueda solo 14 unidades, transformándose en el segundo peor equipo del semestre, solo por encima de Curicó Unido.

En la segunda rueda de 2022 fue 13º con 13 puntos. Y en 2021, el desplome fue aún más duro: el peor equipo del semestre con 11 puntos, salvándose del descenso directo en la última fecha.

Bajo la administración Sartor, la única excepción ha sido el 2024, cuando Álvarez logró quebrar esa tendencia y mantener al equipo en la pelea por el título, impulsado principalmente por el regreso de Charles Aránguiz a mitad de año.

Gustavo Álvarez ha sufrido en el inicio de la segunda rueda.
Universidad de Chile.Gustavo Álvarez ha sufrido en el inicio de la segunda rueda.

El caso Sebastián Rodríguez

En medio de esta crisis, la ausencia de Sebastián Rodríguez en la citación del Superclásico encendió aún más las críticas. El uruguayo llegó como el refuerzo estelar del mercado de invierno, pero Álvarez decidió dejarlo al margen en un momento clave.

“No quiero generar polémica, porque mientras esté el mercado abierto puedo hablar porque puedo modificar algo, pero estando cerrado es generar polémica. Es conveniente hablarlas adentro de las puertas del club”, señaló el DT tras la caída ante los albos.

La frase dejó la sensación de que el técnico no quedó conforme con el mercado de fichajes de invierno del Romántico Viajero, que estuvo semanas a la espera de Eduardo Vargas, quien terminó llegando a Audax.

Tras el clásico, Álvarez fue más allá de la autocrítica y lanzó un dardo indirecto a la dirigencia: “Me parece que este club no puede estar 9 años sin salir campeón. Algo pasa. Si se repiten patrones, hay que analizar por qué”.

Aunque Álvarez asumió su responsabilidad, marcó distancia de la historia reciente. “Yo llevo 2 años en el club, me hago cargo de estos 2 años. Pero hay 7 anteriores con los mismos resultados. Para tener resultados distintos, hay que hacer cosas diferentes”, complementó.

Ahora, la misión de Universidad de Chile -que mira a distantes 15 puntos a Coquimbo Unido- será tratar de no caer dramáticamente y sumar unidades para al menos clasificar directo a la próxima Copa Libertadores.

En paralelo aparece la Copa Sudamericana, un torneo que en caso de resolverse de forma positiva en los escritorios, podría salvarle un semestre que hasta ahora es muy complicado para el equipo de Gustavo Álvarez.