
Este jueves comienza la semifinal de la Copa Sudamericana 2025 entre Universidad de Chile y Lanús, con el partido de ida programado en el Estadio Nacional.
Un duelo con historia, ya que ambos equipos se enfrentaron por última vez en la Sudamericana 2013, cuando el elenco argentino eliminó a los azules con un marcador global de 4-1 en los octavos de final.
Aquel cruce no solo significó una eliminación dolorosa para la U, sino que también marcó un antes y un después en la historia del club.

En esa serie, Carlos Heller, entonces presidente de Azul Azul, quedó sorprendido por el rendimiento del conjunto argentino dirigido por Guillermo Barros Schelotto, quien compartía la dirección con su hermano mellizo Gustavo Schelotto, conformando una exitosa dupla técnica.
Impresionado por esa fórmula, Heller comenzó a evaluar la posibilidad de replicarla en el fútbol chileno. Años más tarde, tras una etapa de inestabilidad deportiva en la U, decidió apostar por un formato similar.

En 2016, luego de la salida de Sebastián Beccacece, la dirigencia azul nombró a Víctor Hugo Castañeda y Luis Musrri como dupla técnica del primer equipo, siendo el primero quien figuraba oficialmente como entrenador principal.
Sin embargo, la experiencia no dio los resultados esperados: los malos rendimientos y algunos conflictos internos terminaron precipitando su salida.
Desde entonces, el experimento no volvió a repetirse. Ni Universidad de Chile ni otro club del fútbol chileno apostaron nuevamente por una dupla técnica, quedando aquel intento como una curiosa anécdota en la historia reciente del club laico.