Universidad de Chile no solo se fue con las manos vacías del duelo ante Universidad Católica, sino que además sumó nuevas preocupaciones en el plantel de cara al decisivo duelo ante Lanús.
El Claro Arena dejó secuelas importantes en la enfermería azul, especialmente en dos nombres claves para Gustavo Álvarez: Lucas Assadi, quien abandonó el campo por una lesión muscular, y Marcelo Díaz, que terminó con visibles molestias.
La lesión de Marcelo Díaz
El capitán azul tuvo que someterse a revisión médica -al igual que Assadi- tras el encuentro, siendo visto con hielo en la zona afectada tras salir reemplazado de la cancha en lugar de Fabián Hormazábal.
Los primeros reportes apuntan a una sobrecarga muscular, descartando una lesión de mayor gravedad. De todas formas, el cuerpo técnico decidió mantenerlo bajo observación durante los entrenamientos de esta semana.
El diagnóstico preliminar entrega cierto alivio en el Centro Deportivo Azul, ya que no existiría un desgarro, lo que abre la posibilidad de que Díaz pueda estar disponible para el trascendental duelo de vuelta ante Lanús por las semifinales de la Copa Sudamericana.
Díaz estará en Argentina ante Lanús
La presencia del volante en Buenos Aires será clave para sostener el equilibrio del mediocampo y la experiencia en un escenario complicado tanto por lo que se juega en la cancha, como por el clima externo que espera a los azules en territorio bonaerense.
Por ahora, solo Matías Sepúlveda está descartado para el enfrentamiento de este jueves. Con Assadi prácticamente fuera de la convocatoria, Díaz le da una buena noticia a Gustavo Álvarez con su disponibilidad para uno de los desafíos más importantes de los últimos años para Universidad de Chile.