La administración de Universidad de Chile vive un sensible momento. La histórica sanción aplicada por la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) contra Michael Clark, con una multa de UF 65.000 (2,7 millones de dólares) y una inhabilidad de cinco años para ejercer cargos directivos, generó un terremoto dirigencial justo cuando el club pelea su clasificación a la Copa Libertadores y planifica el 2026.

Durante las últimas horas, desde el Centro Deportivo Azul se ha intentado mantener la calma, pero los pasos que vienen no serán simples.

Según información de En Cancha, Clark tiene hasta el próximo lunes para presentar la apelación ante la CMF, aunque desde su entorno aseguran que buscará hacerlo antes de este viernes, con el objetivo de activar cuanto antes las instancias recursivas.

La apelación y el escenario judicial que viene

Pese al recurso que ingresará Azul Azul, en el club reconocen que es altamente probable que la CMF rechace la apelación antes de que termine el torneo 2025, es decir, en las próximas dos semanas.

Sin embargo, ahí recién comenzará el tramo más complejo: Clark ya decidió recurrir al Poder Judicial, un proceso que podría estirar la resolución definitiva hasta el primer trimestre de 2026.

VIDEO | Los 3 jugadores más infravalorados de la U en los últimos tiemposLee tambiénVIDEO | Los 3 jugadores más infravalorados de la U en los últimos tiempos
Michael Clark enfrenta un sensible momento institucional.
Universidad de Chile.Michael Clark enfrenta un sensible momento institucional.

Mientras ese trámite esté en curso, la sanción no estará ejecutoriada, lo que permite que Clark siga ejerciendo como presidente de Azul Azul.

El propio Clark lo dejó claro en conversación con Radio Cooperativa, donde entregó sus primeras declaraciones públicas tras el fallo.

“La verdad es que este fallo no me lo esperaba, no estoy contento con él. Creo que es muy injusto. En el proceso sancionatorio se me hacen dos cargos y presenté varios descargos... al leer en diagonal el fallo, creo que ninguno de mis descargos se toman en cuenta”, apuntó el empresario.

Mientras este fallo no esté firme por el Poder Judicial, no entra en vigencia, y por lo tanto voy a seguir siendo presidente de la U. Vamos a apelar en todas las instancias porque considero que muchos descargos no se toman en cuenta y es una sanción injusta hacia mi persona”, declaró Clark.

Un problema que golpea directamente lo deportivo

Si bien el escenario judicial podría extenderse por varios meses, lo más sensible para la institución será el impacto en la planificación deportiva del 2026, proceso que comienza tras el cierre de temporada.

Con Clark aún en el cargo mientras no haya sentencia firmada, será él quien encabezará, junto a Manuel Mayo las decisiones sobre la continuidad o salida de Gustavo Álvarez, la elección de refuerzos y las ventas de algunos jugadores.

El riesgo, entonces, está latente. Si en medio del mercado de fichajes su apelación es rechazada, la autoridad podría inhabilitarlo en plena planificación, generando una crisis interna en el momento más inoportuno.

Un antecedente reciente que preocupa en el CDA

En Azul Azul no olvidan que el año pasado, cuando el grupo Sartor vendió sus acciones y Clark tomó el control a través del fondo Tactical Sports, varias decisiones deportivas se dilataron. La incertidumbre, en ese entonces, retrasó refuerzos y renovaciones con miras a este año.

Mientras la U se juega su presencia en la próxima Copa Libertadores, su presidente enfrenta un sensible proceso judicial. Al menos en el corto plazo, Clark se mantendrá por ahora al mando de Azul Azul, buscando estirar el proceso para continuar ejerciendo su cargo.

abre en nueva pestañaabre en nueva pestañaabre en nueva pestaña