Charles Aránguiz profundizó en sus críticas contra la ANFP y el Sifup tras el empate entre Universidad de Chile y Coquimbo Unido. El volante aseguró que sus cuestionamientos se deben al nulo respaldo que recibió la U mientras disputó competencia internacional.
“En general, siento muy poco apoyo para los equipos chilenos. Este año me tocó competir internacionalmente, con muchos viajes y desgaste, y nunca sentí que respaldaran realmente al club. Estoy en un equipo grande que hizo un esfuerzo enorme y aun así no vi apoyo ni de la dirigencia ni del SIFUP”.
Aránguiz también explicó por qué no quiere asistir a la gala del fútbol chileno. “Por eso no tengo muchas ganas de ir a esa linda gala a la que me están invitando. No estoy para darle la mano ni fingir sonrisas a personas que pudieron hacer mucho más durante el año. No sé si es falta de respeto, pero me sentí pasado a llevar junto a este gran club”, expresó.
Sobre la Selección Chilena, el volante marcó diferencias.“Es un tema distinto. Hay juventud, es un proceso nuevo y debemos apoyar”, señaló. “Pero en el fútbol chileno se pueden hacer mucho mejor las cosas”.
El mediocampista también apuntó a la programación de partidos ante Universidad Católica y Huachipato en plena semifinal de Copa Sudamericana contra Lanús. “Nos representamos al país y aun así nos tocó jugar una llave durísima y, a los tres días, disputar un partido en cancha sintética a las 12 del día”, lamentó.
“Volvimos de Argentina y tampoco nos dieron tres días para recuperar; tuvimos que viajar y jugar nuevamente a las 12. Mientras tanto, la UC tuvo un clásico un lunes a las ocho de la noche. Eso es apoyo, no estamos pidiendo ayuda”, agregó.
“Solo pedimos un poco de respaldo para que las cosas funcionen bien y para ofrecer un mejor espectáculo a la gente, nada más”, añadió.
Aránguiz también envió un mensaje directo a la ANFP. “Creo que su presidente podría tomar mejores decisiones. Está rodeado de personas que pueden opinar y ojalá pueda escucharlas”, comentó.
El jugador insistió en que la programación debe tener sentido común. “No puedes programar un partido a las 12 del día cuando ni siquiera han pasado tres días del anterior. Jugar seguido se puede, tengo la experiencia de Brasil”, remarcó.
“Allá se juega cada cuatro días y en horarios que permiten un mejor espectáculo. He disputado clásicos con Gremio que paralizan ciudades y aun así se juegan a las seis u ocho de la tarde. Es otra cosa”, cerró.