El cierre del Campeonato Nacional dejó en Universidad de Chile una mezcla difícil de digerir. La victoria en la última fecha ante Iquique no alcanzó para llegar a la Copa Libertadores, y la clasificación a la Sudamericana terminó siendo un premio de consuelo para un equipo que durante largos pasajes del año se ilusionó con algo más.
Con ese sabor amargo aún fresco, el club entra ahora en una semana decisiva: comienza oficialmente el mercado de fichajes y, con él, las decisiones dirigenciales que marcarán el 2026.
Lo primero: la situación de Álvarez
El primer gran tema sobre la mesa es la banca. Gustavo Álvarez ya comunicó su decisión de dejar el cargo, sin embargo, su salida aún no está completamente zanjada en términos contractuales.
En la U todavía no existe acuerdo total respecto a la cláusula de salida del DT trasandino y esa negociación será clave en los próximos días.
En la dirigencia esperan resolver esta semana la situación de Álvarez para, recién ahí, avanzar con fuerza en la elección de su reemplazante. Mientras tanto, ya circulan varios nombres, principalmente desde el mercado argentino, aunque sin avances concretos.
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Los puestos que quiere reforzar la U
Con la banca aún en pausa, también se mantiene en suspenso la planificación definitiva del plantel. De momento, en el CDA tienen claros al menos cuatro puestos donde se necesita un salto de jerarquía: un defensa central, un volante defensivo, un delantero centro y un extremo ofensivo.
Son posiciones consideradas estratégicas para rearmar el equipo tras una temporada irregular, pero todas estas prioridades podrían modificarse según el perfil del nuevo entrenador.
A ese primer listado de necesidades se suman otras urgencias que el mercado irá afinando. Una de ellas es el arco: Cristopher Toselli dejará el club y Universidad de Chile deberá salir a buscar un relevo para Gabriel Castellón.
Además, más allá del delantero que se pretende incorporar como titular, el club también apunta a sumar otro goleador de área que permita tener variantes reales en el frente de ataque.
Algunos llegan, otros se van
En paralelo, el escenario de salidas ya tiene nombres propios confirmados. Lucas Di Yorio y Rodrigo Contreras no fueron comprados tras finalizar sus préstamos, mientras que Ignacio Tapia, Nicolás Guerra y el propio Toselli terminan contrato y no seguirán en el plantel.
A eso se suma un grupo de futbolistas que están en vitrina y podrían ser transferidos en las próximas semanas. En el CDA asumen que, si se concreta alguna venta importante, deberán salir de inmediato a buscar un reemplazante para esa posición.
Así, con la clasificación a la Sudamericana aún como herida abierta, Universidad de Chile entra en una etapa donde nada es al azar.
Primero se deberá resolver la salida de Gustavo Álvarez, luego definir al nuevo estratega y recién después activar con fuerza el mercado. Será, sin duda, un verano movido y con decisiones que no solo apuntan al rendimiento inmediato, sino también a reconstruir un proyecto que, tras 2025, vuelve a tambalear.
