Federico Mateos regresó a Argentina para disfrutar de sus vacaciones, luego de finalizar la temporada 2025 defendiendo la camiseta de Ñublense, donde jugó 37 partidos y marcó siete goles.
En los próximos días, el mediocampista trasandino deberá volver al Centro Deportivo Azul (CDA), para juntarse con el nuevo entrenador de la U, Francisco Meneghini, y definir cuál será su destino, puesto que mantiene contrato con los azules hasta diciembre de 2026.
En el mercado de fichajes del verano 2025, el Romántico Viajero lo mandó a préstamo a Chillán, donde se reencontró con Ñublense tras un exitoso paso entre 2018 y 2022, donde de la mano de Jaime García, logró un ascenso en Primera B y se transformó en uno de sus capitanes.
¿Se reencuentra con Jaime García? Federico Mateos y su gran relación con el DT chileno
Su gran nivel con el Diablo Rojo, de hecho, lo llevó a ser fichado en la institución azul en 2023. Sin embargo, tras la llegada de Gustavo Álvarez un año después, Federico Mateos fue perdiendo terreno mes a mes en el mediocampo universitario.
Antes de llegar a Ñublense, tuvo la oportunidad de reencontrarse con Jaime García unos kilómetros más al sur, en Talcahuano.
El propio estratega chileno había confirmado las intenciones de llevarse a Mateos a Huachipato. Sin embargo, fiel a su estilo, días después confesó que había perdido contacto con el volante de la U, por lo que ya no era una prioridad en su mercado de fichajes.
- ¿Hubo opciones de volver a estar con Jaime García?
Sí, con el profe tengo una muy buena relación, con él y con su cuerpo técnico en general, con Diego Santelices también, el ayudante de campo. Antes de llegar a Ñublense había hablado con Diego, no con Jaime, y sabía que había intenciones de que yo vaya a Huachipato, pero entre una cosa y otra, por negociaciones con la U y por las formas en que querían que yo me vaya, todo eso se terminó decidiendo, tanto en lo grupal como en lo personal, en ir a Chillán
- ¿Entonces no habían perdido la comunicación?
No, nunca, también hay formas de decirlo (risas), pero nunca perdimos la comunicación. Seguían las charlas y todo, pero yo ya había tomado la decisión de ir a Ñublense, y se lo había hecho saber principalmente a Diego Santelices.
- Y ahora, ¿consideras que sería un buen destino para 2026?
Uno nunca cierra las puertas, con Jaime García siempre tuve una relación bárbara. Es más, cuando me tocó enfrentar a Huachipato este año, le fui a dar un abrazo todas las veces que me lo crucé.
- ¿Qué destacas de un entrenador como Jaime García? Es un personaje en el fútbol chileno...
Es un gran técnico, y por sobre todo, una gran persona. Ojalá que el fútbol nos vuelva a cruzar en algún momento. Y si no, que le vaya muy bien, porque lo está haciendo genial, muy bien, por algo salió campeón de la Copa Chile con Huachipato. Aunque con Ñublense también hizo historia. Es un técnico notable, así que siempre le deseo lo mejor, en el futuro se verá si nos volvemos a cruzar en algún camarín.
- ¿Fue García el que mejor rendimiento te sacó en tu paso por Chile?
Sí, yo creo que Jaime fue el técnico con el que mejor rendimiento tuve. Me dio mucha confianza en mis características, en mi forma de jugar, y me dio también mucha libertad. Eso quizás me hizo explotar un poco más mis cualidades.
- Y gracias a ese nivel pudiste llegar a un grande del país...
Por lo mismo, sí, estoy muy agradecido de él, porque todo lo que vino a futuro, como mi llegada a la Universidad de Chile... yo se lo dije, es en parte gracias a él, porque me dio esa confianza, logré confiar en mí, que es lo principal que tiene que tener un jugador para poder seguir creciendo.