Moestafa El Kabir, jugador marroquí del Rizespor de Turquía, pasó a ser una de las personas más desafortunadas dentro del mundo del fútbol este fin de semana.
El atacante fue titular en triunfo 2-1 de su equipo ante el Sivasspor. Sin embargo, su historia no tiene nada de bueno. Todo comenzó antes del compromiso.
El delantero fue olvidado en la concentración y nadie del plantel ni el cuerpo técnico se dio cuenta que hacía falta en el bus. Debido a eso, tuvo que tomar un taxi para poder llegar al estadio a tiempo.
Cuando llegó al recinto intentó ingresar por el lugar que le correspondía a su equipo, pero los guardias de seguridad del estadio lo frenaron e impidieron su acceso. Tuvo que intervenir el DT de su escuadra para que todo se solucionara.
El Kabir fue considerado en el equipo estelar, donde se perfilaba como una de las figuras, pero todo terminó de la peor manera. El goleador sólo alcanzó a estar 13 minutos en cancha y recibió una dura entrada.
Tuvo que ser sustituido y en Turquía se infirmó que sufrió una fractura en una de sus piernas, por lo que deberá pasar más de cinco meses alejado de las canchas.