Peñarol vencía por 2-1 a Miramar Misiones, en la segunda fecha del campeonato uruguayo de Primera División, cuando se armó la grande. El arquero del cuadro aurinegro, Washington Aguerre, se puso a cancherear, dominando el balón y haciendo gestos de burla hacia los rivales y, como era de esperar, estos estallaron en rabia.
Hasta los suplentes se metieron en la pelea en el Estadio Centenario. Resultado: tres expulsados y seis tarjetas amarillas. La Garra Charrúa, que le llaman...