Durante 2022 y 2023 Maximiliano Salas brilló en el fútbol chileno defendiendo los colores de Palestino, lo que provocó que el delantero despertará el interés de Racing, cuadro argentino que terminó contratando al futbolista.
En Avellaneda el goleador se juntó con Gustavo Costas, entrenador que lo había dirigido en los árabes y que lo pidió expresamente para el equipo trasandino.
Sin embargo, la relación entre Maxi y la Academia estaría próxima a terminar, ya que el atacante despertó el interés del gigante River Plate, club que está dispuesto a pagar más de lo establecido en la cláusula del jugador.
Actualmente el contrato de Salas al otro lado de la cordillera establece que quien desee hacerse de sus servicios deberá pagar una cifra de 8 millones de dólares a Racing. Los de Marcelo Gallardo pagarían 10 “palitos” de la divisa norteamericana.
- Te podría interesar: Los “arreglines” que podrían remecer al Mundial de Clubes: River y Boca involucrados
El interés que mantiene el equipo de los chilenos Paulo Díaz y Gonzalo Tapia sobre el ex Palestino es tal, que incluso el entrenador de los Millonarios ya lo habría llamado personalmente, lo que sedujo de sobremanera al atacante que rechazó una primera oferta.
Gustavo Costas está indignado
Con este escenario en el que parece ser cosa de horas para que se confirme el arribo de Maximiliano Salas a River Plate, uno que está molesto con la situación es su actual DT Gustavo Costas, estratega que según Olé estaría decepcionado con el futbolista por ocultarle las conversaciones que mantenía con el Millonario.
Esto porque se dice que el técnico le manifestó hace algunas semanas al jugador que entendería si acepta una propuesta mejor en lo económico y deportivo para él, pero le pidió que esto se lo manifestara abiertamente para poder buscar alternativas de refuerzos de cara al segundo semestre.
