Atlético Mineiro de Iván Román, con él en cancha, clasificó por un global de 3-1 en Copa Sudamericana. Claro que todo pudo ser muy distinto para su rival, Godoy Cruz, con un penal cobrado al inicio del partido por el árbitro chileno Felipe González.
El problema para los de Mendonza es que la acción, una mano del defensa brasileño Hugo, la revisó en el VAR tras haber cobrado la pena máxima.
Y con las imágenes, se retractó. Algo que causó la indignación, no solo de los futbolistas de Godoy Cruz, sino con los argentinos que estaban en la transmisión.
González ha tenido una semana más que polémica, ya que fue el mismo juez del duelo entre Unión Española y Deportes Iquique el pasado viernes.