Han sido casi dos años y medio de larga espera, pero que pueden terminar hoy. Luego de sorprender al mundo en septiembre de 2019 ganando en Virginia su primer título en el circuito PGA, The Greenbrier, con apenas 20 años, esta tarde Joaquín Niemann puede sumar por fin su segunda corona como golfista profesional, lo que seguiría posicionándolo como uno de los mejores deportistas chilenos de todos los tiempos, pese a que su carrera todavía está empezando.
Niemann tiene la primera chance de imponerse este domingo en el prestigioso Genesis Invitational de Los Angeles, un torneo que está siendo transmitido a todo el mundo, donde está compitiendo la mayoría de los mejores jugadores del planeta y que tiene como "anfitrión" nada menos que a Tiger Woods quien, de hecho, sería el encargado de entregarle el trofeo en caso de rematar algo que ha venido sembrando desde el primer día.
De hecho, manteniendo el liderato en las tres jornadas disputadas en el Riviera Country Club de California, "Joaco" podría ser apenas el cuarto jugador de la historia que gana el Genesis de punta a cabo, y apenas el primero desde Charlie Sifford en 1969. Un dominio que, además, le ha permitido romper todos los récords del campeonato, con 19 golpes bajo el par de la cancha, la cifra más baja de todos los tiempos en Los Angeles después de 36 hoyos.
Una actuación brutal, que el jueves y viernes le permitió cerrar con -8 y que, si bien ayer bajó un poco en la segunda parte del recorrido, de todas formas le permitió mantener a distancia al único que a esta altura parece capaz de seguirle el ritmo, el estadounidense Cameron Young (-16).
Eso sí, en el horizonte aparecen tres nombres para no descuidarse: el noruego Viktor Hovland (-13) y los norteamericanos Justin Thomas (-12) y Collin Morikawa (-11), tres superestrellas mundiales capaces de encenderse en cualquier momento y poner una ronda magistral, aunque tienen claro que también necesitarán una caída considerable del chileno, que en tres rondas ha marcado 20 birdies y apenas 5 bogeys... con 2 eagles.
Millonario premio y ascenso en el ranking de la FedEx
En lo económico, en caso de ganar Niemann se aseguraría el mayor premio económico de su corta carrera: 2,16 millones de dólares, casi el doble de los US$ 1,3 millones que obtuvo en The Greenbrier. En total, ya acumula poco más de 10 millones de dólares, en poco más de tres temporadas completas en el PGA Tour.
Además, el chileno tendría un ascenso bestial en el ranking de la FedEx, la clasificación anual que da acceso a los torneos de fin de año. Y si partió la semana en 53° lugar, con un título en el Genesis subiría nada menos que 46 puestos, llegando a la séptima posición.
Además, con el título Niemann garantizaría un lugar en dos de los cuatro Majors del circuito, sin importar sus otros resultados: el Masters de Augusta y el PGA Championship.
Todo eso es lo que se juega Joaquín Niemann esta tarde desde las 15:25 horas de Chile, cuando en compañía de Hovland y Young, entre por cuarta y última vez a la cancha del Riviera Country Club para cerrar la mejor semana de su vida. Tiger Woods lo estará esperando en la línea de meta.
