¿Cerca del retiro? Novak Djokovic ciertamente parece no tener fecha de vencimiento y este miércoles lo demostró en el gran partido de cuartos de final de Roland Garros ante Alexander Zverev.
Luego de perder el primer set, el serbio reaccionó y se llevó las dos mangas siguientes ante el N° 3 del mundo. Y cuando tenía que defender su ventaja en el cuarto, se despachó con un punto increíble: un peloteo de 41 tiros que finiquitó con un gran passing cruzado.
No por nada, el público en el Court Philippe-Chatrier se puso de pie para ovacionarlo, mientras Nole trataba de recuperar el aliento.
