Nicolás Jarry protagonizó una remontada épica y avanzó a la segunda ronda de Wimbledon tras derrotar al octavo cabeza de serie, Holger Rune, por 4-6, 4-6, 7-5, 6-3 y 6-4 en un duelo que se extendió por más de tres horas y media.
En el set definitivo, el danés perdió la paciencia con el público chileno y, tras quedarse con el quinto game, mandó a callar a los fanáticos que alentaban a Jarry, ganándose la reprobación de gran parte del público presente en la court 3.