No culpes a la noche, pero sí a la lluvia. Cristian Garin fue uno de los grandes perjudicados esta semana con la lluvia que azotó al Challenger de Costa do Sauipe. Producto de las reprogramaciones constantes, el tenista chileno se vio forzado a jugar tres partidos en menos de 48 horas en Brasil, que pudieron haber sido más en caso de clasificar a la final.
Sin embargo, el esfuerzo le pasó la cuenta y tuvo que retirarse este domingo en su partido por semifinales ante el paraguayo Daniel Vallejo, tras perder el primer semestre.
Y las consecuencias, lamentablemente, las seguirá pagando.
Esto porque Garin tenía programado jugar otro torneo inmediatamente, el Challenger de Lima que comienza este lunes en la capital peruana. De hecho, hasta tenía rival definido para debutar: nada menos que el principal crédito local, Ignacio Buse (111°).
Pero el chileno tomó la tajante decisión de no hacer el viaje y ya informó a la organización que no participará. Su lugar en el cuadro principal limeño fue ocupado de inmediato por un “perdedor afortunado”, el uruguayo Franco Roncadelli (361°).
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¿Qué se viene ahora para Cristian Garin? Sin duda que un merecido descanso, tras lo cual tendrá que evaluar sus opciones para el cierre de esta temporada.
Tras descartarse de Lima, ahora tendrá dos semanas sin actividad, período que puede aprovechar para recargar pilas, o tal vez para pedir una invitación en un torneo Challenger, a fin de no perder terreno en su gran objetivo del final de año: volver al top 100.
Luego de Costa do Sauipe quedó ubicado 104° y, por ahora, solo con un torneo más en el horizonte: el Challenger de Montevideo, que comienza el 10 de noviembre.
