
Hace poco más de un año, exactamente el 14 de julio de 2024, España se consagraba campeón de la Eurocopa tras vencer 2-1 a Inglaterra. Un día antes, el adolescente Lamine Yamal había cumplido 17 años. Por entonces, el joven de origen marroquí era un intocable. Nadie en España se atrevía a decir de nada sobre un menor de edad, no se hablaba de su entorno, si jugaba un partido no tan bueno, no pasaba nada y todo eran loas.
El país cuidaba a su nueva estrella mundial, bautizada, como tantos otros, como el “nuevo Messi”. Ni el más enconado hincha del Real Madrid era capaz de decir algo malo sobre un talento aún menor de edad.
Pasaron 12 meses, y entremedio, el título de Liga con el Barcelona, actuaciones descollantes en Champions y la consagración como uno de los mejores futbolistas del momento. Sin duda, la mejor figura salida de La Masía desde Lionel Messi, o al menos, el más rimbombante.
Ya convertido en mayor de edad, y en megaestrella mundial, vinieron los primeros derroteros de lo que implica ese monumental mote. En la celebración de su cumpleaños 18, vivió la primera gran polémica de su novel carrera deportiva cuando se destapó que en la aparatosa fiesta que preparó participaron personas con enanismo, esto como una especie de curioso “atractivo”. Se comentó que algunos de ellos estaban, incluso, entre jaulas.
Como en las fiestas de los famosos, había reglas que seguir. No podían haber cámaras, ni teléfonos. Y una clara advertencia: tampoco drogas. Pero eso no bastó para que se filtraran imágenes y estallara el escándalo. Por primera vez, la figura de Yamal dejaba de ocupar espacio en los programas y medios deportivos, ahora era la prensa rosa la que le dedicaba minutos y pantalla al zurdo.
Lee tambiénNo a Miami, sí a Sudamérica: el país que podría recibir un amistoso del Barcelona de Lamine Yamal Fue ese el momento del comienzo de una disyuntiva que se transformó en uno de los debates más candentes en España. El genio que deslumbra en las canchas de fútbol versus el joven que protagoniza portadas por su vida fuera de los focos de un estadio.
Los meses más polémicos de Lamine Yamal
En la cancha, Yamal no sintió el golpe. Siguió descollando, marcando diferencias y deslumbrando al planeta fútbol a punta de goles imposibles, regates y asistencias dignas del crack mundial que es.
Pero fue en el comienzo de la temporada 2025-2026 cuando algo empezó a hacer ruido. El 11 de octubre pasado, cuando la Selección española comenzaba su viaje a Elche para jugar ante Georgia por la noche, un post que la cantante argentina Nicki Nicole publicaba en Instagram con unas imágenes donde se la veía con Lamine paseando en un helicóptero en Croacia (postales preciosas, por cierto), encendieron las alarmas.

En la Ciudad del Fútbol de las Rozas, donde se concentra el campeón europeo, no se daba crédito a lo que se proyectaba en los teléfonos de futbolistas, cuerpo técnico y dirigentes. Y no porque Lamine no pudiera tener un rato de esparcimiento con su novia, sino porque una semana antes, el Barcelona informaba a la Federación Española que el jugador estaba con una pubalgia que le imposibilitaba estar en esa fecha FIFA.
En el podcast “Solo para Culés”, uno de los más escuchados por el barcelonismo, el panelista Toni Freixa, dejó una reflexión, a modo de advertencia por lo que podría empezar a ocurrir en la vida del futbolista. “No sé si puedo darle un consejo a Lamine Yamal, pero está en el foco, todo el mundo está pendiente de lo que hace. Entonces el consejo que yo le daría es que cuantos menos motivos y menos exposición haya para que se hable, mejor. Intenta no prodigarte tanto”, indicó.
Fue este mensaje mucho más suave que lo que se leía en redes sociales, por parte de algunos hinchas de la Selección española, molestos. “Se quejan de los malos y abusan de los buenos”, respondía el atacante en una publicación, también en redes sociales. Un mensaje tan enigmático como desafiante.
Obviamente, no todo fueron críticas. También hubo apoyos al futbolista y llamados a entender el contexto. Así lo hizo Edu Aguirre, periodista de El Chiringuito y reconocido hincha del Real Madrid. “No se le ha pillado en una discoteca de madrugada... no se le ha pillado jugando al waterpolo o jugando con sus amigos en un partido de fútbol”, señaló.
Lo cierto es que esta exposición y una especie de circo mediático en torno al 10 del Barcelona inquietó tanto en el club catalán como en la Selección. “En ambas instituciones preocupa el camino por el que transita Lamine, un niño de 18 años al que toda la industria del fútbol se le ha venido encima de golpe, con lo que eso significa”, publicó El Mundo, el influyente diario español.
Una relación tormentosa ante los ojos de la farándula
El salto definitivo del precoz astro a la farándula, en todo caso, no fue tras su bullada fiesta, sino precisamente cuando se confirmó su noviazgo con la artista trasandina. Ahí, durante el breve tiempo que duró el romance, casi dejó de hablarse del Lamine futbolista.
Las revistas del corazón, los sitios web y programas de TV de prensa rosa comenzaron a llenar gran parte del día con la vida privada y amorosa del joven Yamal. El mismo jugador aparecía en redes sociales y daba material para el acontecer farandulero.
Fueron cuatro meses de idilio público que en el clan Barça preocuparon. No porque dos jóvenes no pudieran enamorarse ni compartir sus aventuras, sino por todo lo externo. Los rumores sobre una relación poco sana estaban a la luz del día durante todo el período, momento que coincidió con un cierto bajón futbolístico del astro.

En Argentina, incluso, se hablaba del tema. El periodista Juan Etchegoyen, de Radio Mitre, afirmó que “la relación no fue sincera”. Pese a esto, los dos se mostraban felices, incluso con la cantante visitando con la camiseta del Barcelona el estadio y el futbolista dedicándole un gol.
Lo cierto es que con todo este panorama, el mismo diario El Mundo finalizaba un largo análisis sobre los problemas extrafutbolísticos del jugador, realizando una pregunta que aún muchos mantienen: “¿Lamine elegirá ser Neymar o elegirá ser Messi?”.
Por lo pronto, su relación con Nicki Nicole está terminada. Fue hace una semana que el propio jugador confirmó la noticia. “No estamos juntos y no ha sido por ninguna infidelidad. Simplemente, nos hemos separado y ya. Todo lo que está saliendo no tiene nada que ver con nuestra relación”, cerró el goleador.
Bajón futbolístico y señales de arrogancia
En el inicio de la temporada en curso, hay otro tema por el que mediáticamente se puede hablar de hasta cierto acoso al futbolista. Ha bastado una lesión y un mal clásico ante el Real Madrid para que muchos le cayeran encima, olvidando todas las espectaculares actuaciones anteriores. A Lamine no se le permite fallar, y para un joven que pese a su estrellato, sigue formándose, es demasiado.
La pubalgia que lo afectó le hizo perderse cinco encuentro del Barcelona y dos de España en el camino al Mundial 2026. Esa, para los entendidos, fue la causa para que el Yamal que asombró al mundo, tuviera un septiembre-octubre que nadie podría catalogar como malo, pero en el que no deslumbró.
En este punto, quizás su partido más bajo fue el último clásico contra el Real Madrid. Tuvo un partido de regular para abajo, claro que seguía con problemas físicos. La crítica de los medios, especialmente los de la capital, no tuvieron mucha piedad. Marca, por ejemplo, lo evaluó con 4. “Parecía que saltaría al césped con una marcha más y muy motivado, pero en la primera parte estuvo más bien desaparecido. Se esperaba mucho más del canterano en un clásico”, fue el comentario sobre su partido. ¿De la lesión? Poco y nada.

Medios catalanes como Sport y Mundo Deportivo, también lo calificaron con nota apenas eficiente, aunque ambos hicieron hincapié en la pubalgia que lo venía afectando.
Pese a que la situación médica podría ser un atenuante para la presentación más baja del futbolista en un duelo contra el Real Madrid, muchos prefirieron olvidar esto en pos de la arrogancia que mostró Yamal previo al partido. Como pocas veces, se metió en polémicas que, una vez más, lo pusieron en el centro del debate.
Posteos provocativos en Instagram y una frase que lo incendió todo, mostró a un Lamine con una actitud que descolocó. “Roban, se quejan…”, lanzó en una conversación con el streamer Ibai llanos, reconocido hincha del Real Madrid. No solo eso, sino que además, el futbolista le recordó al influencer: “¿No te acuerdas de la temporada pasada? la última vez que has ido (al Bernabéu) 0-4”.
Pero esta no fue la única vez que el joven barcelonés habló de esa manera. En abril de este año dijo: “¿Dicen que soy arrogante? Mientras gane, no pueden decirme nada; si me ganan, sí pueden”.
Un campeón del mundo con Francia y exjugador del Barcelona, Emnanuel Petit se refirió a la actitud de los últimos meses del futbolista. “Para consolidarse de verdad, necesita ganar la Champions. Sus cualidades -técnica, visión, potencia, inteligencia en los movimientos- son únicas. Lo único que debe mejorar es la mentalidad”, dijo. Además, aseguró que “Yamal debe tener cuidado con su comunicación y con la gestión de sus redes sociales. A veces se percibe un punto de arrogancia”.
Otros, han sido más duros. Iván Zamorano, fue quizás, quién más duro le ha dado al jugador del Barcelona. Cuando el periodista Josep Pedrerol lo entrevistó en su podcast, El Cafelito, Bam Bam aseguró que no le gustaría ver al zurdo en el Real Madrid. “No, a Lamine Yamal no lo ficho. Es un crack, pero creo que no tiene la esencia de lo que es un jugador del Real Madrid. Yo ficharía a Pedri, es muy sencillo, habla lo justo”.
“El Real Madrid es un equipo con clase, con cultura y para mí quienes juegan en el Madrid tienen que representar eso. Por ejemplo, a Messi, yo jamás lo vi decir que el Madrid roba, y él es el mejor del mundo”, siguió el chileno, junto pedirle al Barcelona que “debe tratar de encaminarlo”.
El entrenador español Paco Jémez es otro más que habló fuerte: “Es muy fácil despistarse con todo lo que se mueve alrededor cuando tienes 17 años. Necesita un buen capitán. Yo tenía un capitán que decía: ‘Míster, una buena colleja a tiempo es fantástica’. Pues sí, y una buena colleja viene fenomenal siempre, y no solo para Lamine, para todos”.
En la última semana, algo cambió. Pareciera ser que tras consejos de su agencia de representación y el equipo de comunicaciones, se ha decidido bajar un poco el tono. Después del partido de Champions contra el Brujas en el que marcó un golazo y volvió a su mejor nivel, un periodista lo comparó con Lionel Messi por su conquista. Esta vez, la respuesta fue mucho más sobria. “(Messi) ha metido 1000 goles así, no puedo compararme. Solo intento mejorar, hacer mi camino y ojalá lleguen más goles”.
Ahora ha llegado un momento de decisiones para Lamine Yamal. Tal como se lo preguntó El Mundo, es momento de saber si el genio deslumbrante quiere seguir el camino de Neymar o el de Messi. Solo él tiene la respuesta.







