El Sevilla FC es un club que, tradicionalmente les ha abierto las puertas a los futbolistas chilenos. Hoy en día, son tres los representantes nacionales en el elenco Hispalense, con Alexis Sánchez y Gabriel Suazo en el plantel masculino y Millaray Cortés en el femenino.

Pero en la historia han sido muchos más. Iván Zamorano, Gary Medel y Bryan Rabello fueron portaestandartes chilenos por el lado de los hombres, mientras que Karen Araya, Francisca Lara, Yanara Aedo y Javiera Toro han sacado la cara por las mujeres.

Con una tradición tan “chilena”, es una importante novedad que la casa de apuestas Betsala firmara para convertirse en patrocinador regional del Sevilla FC por los próximos dos años, un hito que acerca incluso más al elenco de Nervión a nuestro país.

“Nos interesa construir relaciones con instituciones con identidad, con propósito y con valores compartidos, como el juego responsable y el respeto por el hincha”, comenta el gerente comercial de Betsala, Luis Marambio, para explicar este vínculo.

-Se acaban de convertir en auspiciador oficial del Sevilla de Alexis Sánchez y Gabriel Suazo. ¿Por qué les interesó esta alianza y qué objetivo planean conseguir?

El Sevilla tiene una identidad y una historia muy ligadas a Chile. A lo largo del tiempo, han pasado jugadores muy importantes para nuestro fútbol y hoy no es la excepción: está el capitán de la Selección, el goleador histórico y una joven promesa como Millaray Cortés. Esa conexión con Chile fue lo primero que nos llamó la atención. Además, el club representa valores con los que nos sentimos plenamente identificados: confianza, responsabilidad y trabajo a largo plazo. Todo eso hace un match muy coherente con nuestra forma de entender la industria del entretenimiento y el juego responsable. La alianza nació como una idea, se consolidó con una negociación muy profesional y terminó en un acuerdo que nos llena de orgullo. Estamos convencidos de que será una relación duradera y muy positiva para ambas partes.

"Sevilla FC representa valores con los que nos sentimos plenamente identificados: confianza, responsabilidad y trabajo a largo plazo", dice el gerente comercial de Betsala.
Luis Marambio"Sevilla FC representa valores con los que nos sentimos plenamente identificados: confianza, responsabilidad y trabajo a largo plazo", dice el gerente comercial de Betsala.
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Betsala y su impacto en Chile

-En este momento, son patrocinadores de dos equipos en el fútbol chileno: Magallanes y Rangers. ¿Cómo evalúan esta sociedad hasta ahora?

Nuestra experiencia con Magallanes, Rangers y el equipo femenino de Recoleta ha sido muy positiva. Son clubes con arraigo, con hinchadas fieles y muy identificados con su historia, y eso encaja perfecto con la manera en que nosotros entendemos el deporte. En Magallanes ya llevamos dos años y sentimos que la gente nos reconoce, nos identifica y valora nuestra presencia. Las activaciones en el estadio han tenido una recepción increíble. Con Rangers ha ocurrido lo mismo: un trabajo serio, con impacto local y cercanía con la comunidad. En el caso de Recoleta Femenino, nos genera una satisfacción especial. Se habla poco del fútbol femenino y creemos que también es nuestro rol apoyarlo, sin buscar cámaras, sino desde la convicción. Tal vez no todos sabían de ese patrocinio, pero nosotros lo valoramos mucho y lo llevamos con orgullo y entusiasmo.

-Ambos equipos juegan en la Primera B y, por el momento, se ve complejo que puedan ascender. ¿Está en los planes asociarse a algún club en Primera División, la categoría con mayor exposición?

Sí. Hemos tenido algunos acercamientos y propuestas de clubes de Primera División, pero sinceramente no buscamos coleccionar logos ni acumular apariciones. Nuestra filosofía es vincularnos con historia, con hinchadas reales y con personas. No tiene sentido poner un logo solo por estar en una camiseta. Nos interesa construir relaciones con instituciones con identidad, con propósito y con valores compartidos, como el juego responsable y el respeto por el hincha. En ese sentido, estamos muy conformes con lo que hemos logrado con Magallanes, Rangers, Recoleta y ahora con el Sevilla FC. Todos son proyectos con alma, con historia y con una comunidad detrás, y eso vale mucho más que solo visibilidad por visibilidad.

-¿Han planteado expandirse a otros deportes en nuestro país?

De momento, hemos apoyado algunas ligas de fútbol amateur y seguimos muy vinculados al fútbol femenino. También estamos explorando proyectos en eSports y observando con atención el crecimiento de disciplinas como el rugby y el tenis, que están viviendo un muy buen momento en Chile. Nos interesa estar donde haya historia, comunidad y valores, no simplemente donde haya público. Preferimos asociarnos a deportes y organizaciones que representen algo, que tengan propósito y que conecten emocionalmente con su gente. Esa es la manera en que entendemos las alianzas deportivas.

Apuestas en Chile: una actividad que requiere regulación

-Según la justicia chilena, las casas de apuestas en nuestro país son ‘ilegales’. ¿Qué opinan al respecto?

Respetamos plenamente a las instituciones y no opinamos sobre fallos judiciales en curso. Lo que sí promovemos es una regulación clara, moderna y muy estricta: que proteja al usuario, que garantice la integridad deportiva, que prevenga el lavado de activos y que impida la participación de menores. Apostamos por una legislación con estándares altos y controles reales. En Chile se han instalado muchos mitos sobre las casas de apuestas. A veces, se imagina a alguien en un sótano hackeando el sistema y eso está muy lejos de la realidad. Esta es una industria profesional, que cumple normas internacionales y que ya está regulada bajo licencias como en nuestro caso, la de Curazao, donde se exige y fiscaliza un montón de cosas como trazabilidad de fondos, auditorías constantes y presencia física de representantes que velan por el cumplimiento de todas las condiciones. Nosotros no nos escondemos, yo te hablo con nombre, apellido y foto. Tenemos nombres, caras y una operación transparente. Nuestro fundador ha estado en Chile, reuniéndose con actores del ecosistema, expresando su deseo de tributar localmente y de operar bajo una ley chilena. Somos una empresa que trabaja de manera abierta, con gente real que se gana la vida de esto y que quiere lo mismo que todos: una industria limpia, responsable y sostenible.

La Academia es uno de los cuadros que están asociados con Betsala.
Magallanes.La Academia es uno de los cuadros que están asociados con Betsala.

-¿Hay un problema de monopolio, considerando que la demanda en curso fue interpuesta por Lotería, un organismo estatal que opera sin problemas hace décadas en Chile?

No opinamos sobre actores específicos del mercado, pero sí creemos en la competencia como principio. Cuando hay competencia bien regulada, gana el consumidor: recibe mejor servicio, más innovación, mejores estándares y también el Estado se beneficia con una mayor recaudación. Lo importante no es quién compite, sino bajo qué reglas se compite. Que sean las mismas para todos, con exigencias claras, transparencia y fiscalización efectiva. Nosotros estamos totalmente abiertos a operar bajo ese marco. Queremos competir de forma justa, profesional y con reglas iguales para todos.

-El reciente fallo de la Corte Suprema obliga a los sitios online a bloquear sus publicidades. Una decisión que es inapelable. ¿Cómo planean sortear este inconveniente?

Nosotros cumplimos los fallos y ajustamos nuestras acciones de marketing a los canales permitidos. En paralelo, hemos reforzado nuestra comunicación educativa en espacios propios, sobre todo en torno al juego responsable, que es uno de los pilares de Betsala. Promovemos la autoexclusión, los límites de juego y la verificación de edad. En nuestra plataforma no pueden jugar menores, porque cada cuenta debe verificarse con una cédula de identidad y los pagos se realizan únicamente a cuentas vinculadas a ese mismo RUT. No queremos niños jugando, el único “niño” que queremos es el “Niño Maravilla” que juega en el Sevilla. Nuestro foco está en construir reputación, fortalecer la confianza y preparar al mercado para la transición hacia una industria regulada, que sabemos llegará pronto. No buscamos evadir decisiones judiciales, sino adaptarnos a lo que dictan las autoridades y avanzar hacia un modelo con reglas claras y responsables.

-¿Qué consecuencias puede generarle a la actividad el perder a las casas de apuestas como protagonistas? No es un misterio que generan muchos recursos, de forma directa e indirecta...

Absolutamente, basta con encender el televisor y ver un partido del fútbol chileno para notar la masiva presencia de la industria del betting en el deporte. Otras categorías que anunciaban tradicionalmente en el deporte han reducido su inversión dramáticamente y hoy las casas de apuestas se han convertido en el último bastión que sostiene este ecosistema. Hablamos de federaciones, clubes, medios de comunicación, broadcasters, proveedores y agencias que generan miles de empleos que dependen directa o indirectamente de esta actividad. Es una industria que solo busca estar regulada, descriminalizada y con reglas claras, para poder competir de igual a igual con quienes hoy tienen un marco legal propio.

-¿Por qué es importante regular definitivamente la operación de las casas de apuestas en Chile? Es un tema que lleva muchos años debatiéndose, legal y parlamentariamente...

Lo primero es porque creemos en un mercado competitivo. Una regulación clara genera competencia sana y eso beneficia directamente al cliente, que accede a mejores productos, servicios más seguros y tecnología de punta. También permite fortalecer la protección del usuario, estableciendo límites de depósito, tiempos de pausa, verificación de edad y mecanismos de autoexclusión en casos necesarios. La regulación también fomenta la integridad deportiva. Se pueden generar convenios de monitoreo de partidos, reportar patrones anómalos, establecer protocolos con federaciones y sancionar a quienes intenten manipular resultados. En países como España, eso ya es una realidad. Por otro lado, una ley moderna previene delitos financieros y lavado de activos, al exigir trazabilidad y auditorías. Además, el proyecto contempla impuestos con destino social, que podrían financiar deporte formativo o barrial y programas de salud pública. Finalmente, una buena ley separa a quienes quieren hacer las cosas bien de quienes no, genera certezas y ordena la industria. Nosotros queremos ser parte de esa regulación, seguir operando y aportar al desarrollo del deporte chileno desde la transparencia y la responsabilidad.

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