Mark González pasó a la historia del fútbol chileno al convertir el único gol de la 'Roja' en el histórico triunfo por 1-0 ante Suiza en la fase de grupos del Mundial de Sudáfrica 2010, partido que se jugó hace exactamente 10 años.
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Y hoy desde el retiro, el ex Liverpool recordó al que llamó "el gol más importante de mi carrera" y que le permitió a Chile encaminar su clasificación a octavos de final y cortar la racha de 48 años sin conseguir dos victorias consecutivas en una cita planetaria.
"Teníamos claro qué hacer: desde las pelotas paradas, hasta la función a realizar. Tenía la libertad para atacar y hacer daño. Había que ir a buscar el partido. Nació esta jugada, mágica, porque parte Claudio Bravo, y se terminó concretando", comenzó recordando 'Chico Mark' en entrevista con El Mercurio.
Eso si, destacó el debut ganador ante Honduras para llegar con confianza al partido ante los europeos que venían de un largo invicto: "Era clave empezar así, nos dio la confianza para enfrentar a Suiza, que llevaba muchos partidos sin recibir goles, eran un equipo ordenado, cerrado y le había ganado a España. Me tocó entrar desde la banca y metí el gol. Es un recuerdo que me quedará toda la vida. Hasta hoy me etiquetan en las redes sociales. Pasaron 10 años; es como si hubiese sido ayer".
En esa misma línea hizo hincapié en los cambios del entrenador Marcelo Bielsa, ya que los autores de la jugada de aquella anotación ingresaron en el complemento: Jorge Valdivia, Esteban Paredes y González.
"Es un claro ejemplo de lo que uno le dice a los más chicos, que muchas veces los partidos los definen los de afuera. Los que juegan no son solo 11; los suplentes tienen que estar atentos, leer bien los partidos, porque en cualquier momento uno puede entrar y tiene que ser una solución", expresó el ex delantero del CSKA Moscú.
Sobre la jugada del gol a los 75 minutos en el Estadio Nelson Mandela, donde el 'Mago' Valdivia le metió un pase en profundidad a Paredes, quien se sacó del camino al portero Diego Benaglio y le dejó el centro servido para que anotara de cabeza, Mark recordó:
"Tenía claro lo que tenía que hacer. Y el gol más perfecto no podía ser: si le pegaba un poquito más fuerte pegaba en el palo y si le pegaba un poquito más despacio la sacaba el defensa. Cabeceo con esa intención y cuando veo que se va muy arriba, esos mini segundos fueron muy angustiantes… Decir: 'chuta, entra o no entra, porque más encima era un gol hecho'. Cuando entra, el grito de gol fue sacarme todo, entre rabia y alegría. Me vacié gritándolo", detalló.
"Es el mejor recuerdo y el gol más importante en mi carrera. Jugar en el Mundial es un sueño, imagina un gol… Con otro resultado hubiese sido diferente, pero fue 1-0 en un partido súper cerrado y que permitió la clasificación. Quedará por el resto de mi vida, me enorgullece mucho", finalizó el hoy panelista del CDF.