
Luto en el fútbol español y sudamericano, y también en el chileno. Este viernes, a los 72 años, falleció Xabier Azkargorta, recordado DT que dirigió a La Roja a mediados de la década de los 90.
Así lo confirmó Oriente Petrolero de Bolivia, el país donde más se le recuerda.
Lee tambiénFrancia al Mundial 2026: resultados de hoy jueves 13 de noviembre en las Clasificatorias Europeas¿Quién era Xabier Azkargorta?
Si bien como jugador no tuvo una carrera destacada -jugó en los dos equipos vascos, el Athletic Bilbao y la Real Sociedad- fue como DT donde Azkargorta consiguió sus mayores logros.
Pero curiosamente no fue en España, sino que en Sudamérica. Reconocido como formador de jóvenes talentos, en 1993 llegó a Bolivia para hacerse cargo de una misión casi imposible: clasificarlos al Mundial de Estados Unidos.
Pero sorprendió a todo el continente con un campañón, haciéndose fuere en la altura de La Paz -le propinó a Brasil la primera derrota de su historia por Eliminatorias- y logró sacar pasajes a la cita en Norteamérica, con una Generación Dorada donde destacaban nombres como Marco Etcheverry, Erwin Sánchez y Carlos Trucco, entre otros.
Fue ese logro el que llamó la atención de La Roja, donde Ricardo Abumohor buscaba a un nuevo piloto que tomará el mando de la Selección, tras varios años a los tumbos.
Con la expectativa de volver a disputar una clasificatoria luego del castigo por el “Bengalazo” del Cóndor Rojas en 1989, se le recibió casi como un Mesías.
Sin embargo, aunque hubo éxitos esporádicos, nunca logró convencer ni al medio ni a los hinchas. En su primera competencia oficial -la Copa América de 1995 en Uruguay- fracasó rotundamente, consiguiendo solo un empate y quedando eliminado en fase de grupos.
El resto de esa temporada y casi todo el año 96 lo dedicó a tratar de armar un plantel que permitiera empezar la ruta al Mundial de Francia 1998. Pero el puntapié inicial terminaría siendo su punto final en La Roja.
En medio de un ambiente muy pesimista, se logró uno de los peores resultados de nuestra historia hasta ahora, empatando en la primera fecha ante Venezuela en Barinas. Un resultado que pudo ser todavía peor, ya que la igualdad llegó a los dos minutos de descuento.
Tras ese traspié, su bitácora en La Roja no dio para más, y renunció en su vuelta a Santiago. “Una vez muerto el perro, se acaba la rabia”, fue la frase con la que sentenció su corto y bullado periplo por la Selección. Uno que, pese a todo, dejó una huella en el fútbol chileno.








